El 3-5-2, el sistema de Paco López para romper dinámicas
El Levante UD llega a la jornada 10 de LaLiga Santander sin levantar cabeza. Hasta el momento, el conjunto de Orriols ha cosechado un total de tres empates, cuatro derrotas y tan solo una victoria, ante el CA Osasuna en El Sadar. Cabe recordar, además, que los de Paco López tienen que recuperar todavía un partido contra el Atlético de Madrid.
Uno de los principales problemas que presenta el Levante esta temporada es la falta de solvencia tanto en ataque como en defensa. A los levantinistas les anotan muy fácil, mientras que a ellos les cuesta horrores hacer gol. Muestra de ello fueron sus dos últimos encuentros, en los que se quedaron contra diez jugadores y no fueron capaces de llevarse los tres puntos, además de que tampoco han podido dejar la portería a cero en ninguna jornada. Es por ello que Paco López ya anunció, a la finalización del encuentro contra el Deportivo Alavés, que el equipo sufriría algún tipo de modificación en todos los aspectos.
Esta mala racha recuerda a la que ya tuvo el Levante en la temporada 2018-2019, la primera que el técnico de Silla disputó al completo. En aquel curso, el conjunto granota empezó venciendo ante el Real Betis en su estadio, pero luego encadenaría cuatro derrotas y un empate.
Para salir de esa dinámica, Paco López decidió revolucionar el sistema de juego granota. Para ello, apostó por poner sobre el terreno de juego un 3-5-2. Con esto, el Levante contaba con tres centrales acompañados de dos carrileros, por lo que cuando el equipo precisaba de ayuda en defensa este sistema se convertía en 5-3-2.
Los buenos resultados no tardaron en dejarse ver, pues los granotas consiguieron encadenar hasta cuatro victorias consecutivas, siendo una de ellas en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid. Tras esto, los de Orriols consiguieron un empate ante el Villarreal en LaLiga y el Lugo en Copa del Rey, y la primera derrota llegaría ante la Real Sociedad en el Ciutat de València.