Remontada desde el banquillo para mantener la racha en el Ciutat

El Levante UD suma y sigue. El conjunto granota remontó un gol inicial gracias a los cambios de Paco López que vio como, en un error inantil del siempre infalible Aitor Fernández, vio como el Éibar se adelantaba en el marcardor en los minutos iniciales de la segunda mitad. Tras el gol, Melero, que salía de refresco, y el comandante Morales fueron los autores de los goles en el 65' uy en el 76'. Cuarto triunfo consecutivo en casa que permite a los granotas mirar hacia arriba en la clasificación.

De incio Paco López apostó por su once de gala disponible. Esto es, Aitor Fernández, Miramón, Postigo, Duarte, Clerc, De Frutos, Radoja, Malsa, Morales, Roger y Dani Gómez. No se puede reservar nada en esta LaLiga Santander tan igualada y competida. Los dos conjuntos llegaban igualados en la tabla y así empezaron, respetándose, aunque con un Éibar un poco más lanzado que el Levante, al menos más adelantado. La presión de los de Mendilibar bloqueó inicialmente a los granotas, que no encontraban la forma de sacar el balón con fluidez.

En una de las pocas salidas que pudo enganchar el equipo granota, De Frutos arrancó una falta en la frontal que Morales, en pleno proceso de tira y afloja por su renovación, colgó al área sin más consecuencias. Fue un oasis en un partido en el que pasaban pocas cosas, especialmente en las áreas. De hecho, la mejor ocasión en los primeros 20 minutos fue un lanzamiento lejano de Inui que se fue desviado por poco.

Ante esta tesitura, el Levante comenzó a jugar en largo con lanzamientos de su meta Aitor Fernández buscando a De Frutos, Roger o Dani Gómez. Al menos así el equipo de Paco López pisó el área rival y al filo de la media hora dio la sensación de poder adelantarse en el marcador. El interior derecho, por ejemplo, tuvo una que la envió fuera desde la media luna del área de Dmitrovic.

El Éibar se adelanta

Sin tiros entre los tres palos pero con un Levante ligeramente más animado tras dos aproximaciones del japonés Inui se llegó al descanso. Tras el paso por vestuarios, se repitió el panorama inicial pero con alguna diferencia. Así, en el primer minuto, Edu Expósito lanzaba el primer balón entre los tres palos aunque sin demasiados problemas para Aitor. Era, sin embargo, el preludio del 0-1. El meta, siempre seguro, cometió esta vez un error en la entrega y se la dio a Kike García, el rechace posterior le cayó a Inui que no perdonó el 0-1. La presión adelantada del Éibar daba sus frutos y el Levante iba a remolque en un choque que no había sufrido hasta el momento.

Los granotas empataron a la jugada siguiente por mediación de Radoja pero fue anulado por fuera de juego claro de Dani Gómez. Fue una tímida reacción, ya que en el 60 Aitor volvió por sus lares para salvar por dos ocasiones el segundo tanto.

Paco López cambia al equipo y remonta

Paco López, serio, miró al banquillo para enmendar la plana y sacó a Sergio León, héroe en la Copa y Melero por Dani Gómez y Malsa. La jugada le salió perfecta al técnico ya que, fue salir y besar el santo. Balón largo para Roger que la pone en profundidad para Morales. El capitán apuró la jugada hasta la línea de fondo y la puso atrás para que Melero llegando de forma imperial anotara el 1-1. Gol 'made in Levante' con una transición rápida.

El Levante se soltó el pelo y empezó a acumular llegadas al área vasca y logró la remontada gracias a Morales. Otra gran contra de libro. La empezó Sergio Leópn, la cede a Jorge De Frutos que, veloz por la derecha, cogió en paños menores a la defensa armera. El segoviano la puso en bandeja para el comandante marcara a placer. 2-1 en diez minutos

Sergio Postigo, que volvía hoy, con algunas problemas, dejó su puesto a Coke y asistió en primera persona a una nueva gran intervención de Aitor para salvar el empate eibarrés tras una vaselina que el meta acertó despejó con clase. Fue la antesala de los dos últimos cambios de Paco López para aferrar la victoria. Apostó por cuatro laterales sacando a Toño y Son por Roger y De frutos y disponiendo a su equipo con defensa de cinco.

Dmitrovic como un jugador más subiendo al remate en los últimos córners pusieron la nota final a un partido que el Levante remontó desde el banquillo.