Si de algo no adolece el Sporting en este inicio de temporada es de ganas y ambición. Ramírez puede presumir de que su equipo pelea hasta el final y gracias a ello ha cosechado varios puntos en lo que va de competición. Incluso hasta en el escenario más complejo o de mayor euforia, siempre hay lugar para ir a por más. Eso fue lo que demostró Roque Mesa durante el duelo ante el Zaragoza que terminó en empate a dos.
Corría el minuto 97 de partido. Insua aprovechó un error garrafal del meta visitante Poussin para robarle la cartera y anotar casi a puerta vacía. Un tanto que llevó el éxtasis a las gradas de El Molinón y también al césped, donde los jugadores se apilaron unos sobre otros.
Entre tanta euforia apareció Roque Mesa. Al mediocentro le pudo la ambición y, viendo que todavía quedaban un par de minutos por delante, corrió hacia sus compañeros para separarlos y decirles que se fueran para su propio campo para sacar rápido. El canario creía en la remontada. Esta, finalmente, no llegó, pero esa ambición es buena prueba del estilo que Ramírez ha impregnado en su vestuario.
Esto de Roque, qué.
Hoy más que nunca, NOS VAN A VER VOLVER. pic.twitter.com/RkhfbVBxo4
— Iván Otero (@IvanOtDiaz) October 14, 2023
El técnico siempre se muestra orgulloso de lo que hacen sus chicos y ante el Zaragoza lo volvieron a demostrar, levantando un 0-2 adverso en apenas 10 minutos. La actitud de Roque Mesa es la que todo el sportinguismo desea ver.