Con la sonrisa del deber cumplido, de haber sumado tres puntos en un escenario donde "a ver cuántos ganan aquí esta temporada", Julián Calero se mostró satisfecho, pero con cautela porque "no hemos empezado bien, pero nos hemos repuesto" y ensalzó estos tres puntos por estos días previos condicionados por las inscripciones. "Nos faltaban algunos jugadores que no hemos podido tener por inscripciones y demás, pero hemos ganado en El Molinón", explicó Calero.
Paralelamente al lo puramente deportivo, el otro foco está en el mercado de fichajes, en el cierre de la plantilla, con el nombre propio de Pablo Martínez, los jugadores que aún faltan por venir y las inscripciones pendientes (Iborra, Pampín, Rober Ibáñez y Alfonso Pastor). "Es una cuestión económica porque si a mí me preguntan, no quiero que se vaya Pablo. En la vida siempre hay que tener esperanza. Mientras no me digan que no es jugador nuestro, sigo confiando en que pueda quedarse", afirmó el técnico granota. Un deseo que ya dijo en su día en la entrevista concedida a El Desmarque.
"No hemos empezado bien. En el primer gol de ellos hemos tenido la fortuna de que Dubasin estaba un pelín metido, quizá un pie o medio cuerpo... pero hemos cometido un error grave en el inicio del juego y nos hemos repuesto. Hemos conseguido dos goles en situaciones donde somos fuertes: llegando por fuera, cargando área y en el balón parado".
"A partir de ahí, el partido ha venido más para nosotros, con una posesión decente. En la segunda parte nos ha faltado balón y piernas. Muchas cosas que son normales en los inicios. Además, nos faltaban algunos jugadores que no hemos podido tener por inscripciones y demás. Pero hemos ganado en El Molinón. Vamos a ver cuántos ganan en aquí esta temporada. Tenemos que mejorar, pero me voy muy satisfecho y le doy mucho valor a esta victoria".
"Igual que nos faltaban piernas a nosotros, al Sporting igual. Queríamos tener balón con Algobia, Kocho y Oriol, y hemos metido a Lozano por fuera para que lo encontrara dentro. No es que hayamos sufrido mucho, pero si hubiéramos tenido más el balón hubiésemos sufrido un pelín menos. Indudablemente hay que mejorar, pero se mejora mucho mejor desde la base de ganar partidos. El estado de ánimo es mucho mejor".
"No estaba para más tiempo y, además, viene de una lesión en el cuádriceps. En el descanso se ha puesto hielo y no quería tener sorpresas con él. Hay que entender las cosas que suceden: a partir del 60, en estas fechas, los jugadores entran en un déficit físico. Y ahí es donde se empiezan a lesionar. Su cambio buscaba matar dos pájaros de un tiro: intentar hacer más fuerte el centro del campo y proteger a Carlos".
"Estamos a principio de temporada. Démosle tiempo al tiempo. Está cogiendo fuelle, va a ser un jugador muy importante. Paciencia. Para coger la forma, los 20 años no son los mismos que los 37. Hay que entender eso. Le voy a ir dosificando. Cuando he visto que se ha agotado, hemos metido cambios. Ha jugado Espí, ha jugado Cabello, Andrés, Marcos... se van metiendo jugadores de la casa y valencianos que serán importantes".
"En la vida siempre hay que tener esperanza. Mientras no me digan que no es jugador nuestro, sigo confiando en que pueda quedarse. Si no es así es porque el club tiene alguna gestión que hacer inevitable. Porque si a mí me preguntan... yo no quiero que se vaya Pablo. Es importante y me gusta. El club tiene que hacer operaciones, y el dueño, el presidente, Felipe... saben lo que yo quiero. Pero es una cuestión económica y ahí el entrenador poco puede hacer".
"Es el primer partido, vamos a tener los pies en el suelo. Rubén (Albés) intenta dar un estilo más atrevido, pero en estas alturas, sin piernas, es difícil hacer eso. Creo que el equipo tiene mucho nivel, pero la categoría tiene tanto que todos los rivales son potencialmente muy fuertes. Creo que el Sporting va a pelear porque Albés es un gran entrenador".