Málaga 4-1 Andorra: bocanada de oxígeno con una brillante goleada en La Rosaleda

El Málaga ha conseguido sumar este domingo una valiosa victoria frente al Andorra. Con goleada con el doblete de Jauregi y los goles de Larrubia y Lobete, el cuadro malaguista ha brindado a su afición un partido brillante. Tuvo que vivir la mitad del partido con un hombre menos, con la expulsión de Brasanac, pero no se aminoró y asumió responsabilidades para dejar tres puntos vitales en La Rosaleda.

El partido arrancó muy intenso, con presión muy alta por parte del cuadro malaguista. A punto estuvo Larrubia de meter en un buen lío a Yaakobishvili, pero no fue hasta el 10' cuando rozó la primera ocasión. El extremo recibió en profundidad y buscó el hueco para armar un latigazo que se marchó fuera por poco.

Tras él fue Joaquín Muñoz quien mandó alto un balón tras una perfecta triangulación con Dotor. Y poco después, en el 20', llegó el tanto de Larrubia tras aprovechar una mala salida de balón de Yaakobishvili. Lo robó, se deshizo de sus rivales para plantarse en el cara a cara y no fallar ante el meta húngaro. Marcó un golazo y lo celebró. ¡Vaya si lo hizo! Se marchó corriendo visiblemente emocionado. Terminó llorando y pidiendo perdón.

A punto de estuvo también de hacer otro más con una ocasión clarísima que Yaakobishvili acertó a despejar. También lo intentó Chupete después de una combinación entre Larrubia y Rafina, pero su latigazo lo despejó el meta rival con una gran intervención.

Las ocasiones andorranas llegaron en un disparo de Marc Doménech que se estrelló en los dos palos y poco después en un remate de Le Normand que tocó Alfonso Herrero y Rafita tuvo que sacar sobre la línea.

Tras el paso por vestuarios, las cosas se complicaron para el Málaga con la expulsión de Brasanac. En el 48', el centrocampista serbio vio la roja directa tras una dura entrada a Le Normand. Brasanac llegó tarde y entró con la plancha que dejó al futbolista del Andorra sobre el césped. La roja era clara y el colegiado no se lo pensó, expulsando al jugador y dejando al cuadro malaguista con diez.

Lejos de amedrentarse, el cuadro malaguista puso toda la carne en el asador y consiguió ampliar distancias por medio de Lobete. Tras una gran jugada del equipo, Larrubia terminó poniéndola atrás, tocó en un jugador del Andorra y cayó en Lobete, que no falló ante el meta húngaro.

Ya en el tramo final, en el 86', siguió la emoción. El Málaga consiguió dar de nuevo un golpe certero con el gol de Eneko Jauregi. El tanto llegó tras una gran conducción de Lobete en carrera que aguantó hasta la llegada de Eneko, que la picó para subir el 3-0 al marcador. A pesar de que Manu Nieto consiguió recortar distancias en el 90', Jauregi volvió a golpear, dejando así los tres puntos en La Rosaleda para dar de nuevo una bocanada de oxígeno a los malaguistas.