El héroe de El Madrigal avala a Gracia y Charles

El nombre de Gerardo García León (Sevilla, 1974) está ligado a uno de los momentos más felices de la historia del Málaga. Un gol suyo, de falta, en El Madrigal permitió conquistar la Intertoto y jugar la Copa de la UEFA en la temporada 2002/03, en la que el sueño de haber jugado en Sevilla una final de se acabó abruptamente en Oporto ante el Boavista.

Gerardo García estuvo unos días en Málaga. Tiene vínculos con el club en el que más tiempo jugó de profesional. De 2001 a 2006, con 156 partidos y cinco goles. Antes, había jugado finales de Champions con el Valencia ante Madrid y Bayern. Llegó desde Mestalla como parte del pago del traspaso de Rufete. Por la banda derecha, como lateral o interior, fue asiduo con Peiró, Juande, Manzano, Tapia y Manolo Hierro. En sus cinco años no jugó menos de 28 partidos de Liga. Seguiría su carrera en Real Sociedad, Córdoba y en la SD Logroñés, donde se retiró con 38 años. Ahora dirige la Academia TikiTaka y entrena en categoría juvenil.
El sevillano atendió en su visita a los medios del club. "Javi Gracia y yo fuimos compañeros en Villarreal y con Charles estuve en el Córdoba", recuerda Gerardo, que piropea al técnico navarro: "Tiene mucho mérito, el año pasado hizo una muy buena temporada. El resultado de esta semana ante el Deportivo les va a venir muy bien para coger ese ímpetu que les hace falta". Tampoco se le olvida dar ánimos al delantero brasileño. "A los goleadores no se les olvida el gol. Charles a sorprender porque tiene calidad y va a hacer bastantes goles", insiste.
Gerardo echa la vista atrás. "Málaga es como si fuese mi segunda casa. Haber estado cinco años en un equipo tan importante es para estar orgulloso", dice mientras rememora su gol decisivo en la Intertoto. Fue el 1-1 en la ida, que se defendería heroicamente en La Rosaleda con 0-0. "Fue en El Madrigal, de falta, y nos sirvió para poder ir a la UEFA. Todos nos acordamos de esa época, fue precioso. Llo importante son los recuerdos que te quedan y ver a gente que estaba en aquel vestuario", rememora.
Etapa post-jugador
Ahora, Gerardo sigue ligado al fútbol. "Entreno a un equipo juvenil de División de Honor en La Rioja, en el grupo 2, el Comillas. También monté una escuela de chavales, de técnica, y sigo ligado al fútbol, que es lo que me gusta", apunta el ex futbolista, que dice que está "ilusionado, porque al final trabajas con gente joven y en un futuro espero seguir escalando y entrenando".