Del 'Nervionazo' a la exhibición de Demichelis

El Málaga acude este sábado al Estadio Ramón Sánchez Pizjuán. En el feudo del Sevilla el conjunto blanquiazul ha logrado recientemente grandes victorias. Desde el 'Nervionazo' de 2005 a la exhibición de Martín Demichelis como mediocentro. Desde que ambos clubes coinciden en Primera el Sevilla solamente dejó de ser favorito en este derbi regional durante los años Champions del Málaga. Pese a la teórica superioridad local, acudir a Nervión ha solido ser un placer para el Málaga.

La campaña 2004/2005 acabó con un Sevilla-Málaga en el que los rojiblancos se jugaban el pase a la Champions. Al Sánchez Pizjuán llegaba un Málaga ya salvado tras una segunda vuelta espectacular, con Antonio Tapia en el banquillo y Baiano y Duda en el campo. Estos dos últimos fueron los verdugos del Sevilla y autores de los goles malaguistas que no sólo impidieron el pase a la máxima competición continental sino que permitieron que lo lograra el Betis, gran rival sevillista. Igualmente esta historia tiene un reverso que no contenta al malaguista más acérrimo: que el Málaga le quitara la Champions al Sevilla hizo que éste jugara la UEFA... Lo que vino después es historia conocida.
Esta victoria es recordada por el malaguismo, aunque hay otras que también fueron celebradas de forma especial por sorpresivas e inesperadas. En 2008 el Málaga era un recién ascendido y el Sevilla venía de arrasar en Europa con dos copas de la UEFA y pelear una Liga hasta el final. Ese Málaga de los Apoño, Adrián, Baha, Duda, Nacho y Weligton, dirigidos otra vez por Tapia, volteó Nervión con Luis Fabiano, Navas, Maresca y Adriano dentro. Ganaron los blanquiazules con tanto de Adrián tras un delicioso pase de Nacho.
La última noche de gloria blanquiazul en el Sánchez Pizjuán fue hace tres años justos. Entonces el Málaga se enseñoreaba por Europa. El Sevilla firmó una buena primera parte y Negredo probó en varias ocasiones los reflejos de Caballero. Manuel Pellegrini vio que la fuga estaba en el centro del campo y por ahí le ganó la batalla al entonces técnico sevillista Míchel. Puso a Demichelis en la medular, el argentino gobernó el partido e incluso adelantó al Málaga de cabeza tras un córner. Coronaba el triunfo de penalti Eliseu, quien anotaba la pena máxima cometida sobre un Joaquín que se quedaba solo frente a Diego López. Otro 0-2 glorioso y al poco Míchel era relevado por Unai Emery.
Desde que ambos equipos se ven en Primera siendo el Málaga Club de Fútbol, los blanquiazules no acumulan malas estadísticas en el Sánchez Pizjuán, al contrario: cinco victorias, cinco empates y tres derrotas.