Keko, el renacido

Sergio Gontán Gallardo, conocido como Keko, ya es nuevo jugador del Málaga. El madrileño, pese a su juventud, ya sabe lo que es sufrir y ver peligrar su carrera. Su etapa en Italia fue un calvario y el Albacete le recuperó para el fútbol en 2014.

Siempre fue una de las perlas de la cantera del Atlético de Madrid, pero vio como varios compañeros le adelantaban por la izquierda y él seguía sin dar el salto y ser ese gran jugador que apuntaba a ser. Keko se convirtió en el debutante más joven del conjunto colchonero a sus 16 años y 307 días y en la cantera rojiblanca le llegaron a llamar el pequeño 'Futre'.

Ojeadores y técnicos alucinaban al ver la velocidad, el descaro y la calidad de un Keko que por aquel entonces hacía incluso más ruido que los Koke, De Gea o Álvaro Domínguez. Pero el de Brunete apenas volvió a tener oportunidades y se marchó cedido a Valladolid, Cartagena y Girona, tres aventuras en las que no demostró lo que se esperaba de él. 

Calvario en Italia

En 2011 tomó la decisión más difícil de su carrera y se marchó del Atlético rumbo al Catania, donde le prometieron mucho y cumplieron poco. Le dijeron que el proyecto giraría en torno a él y meses después lo mandaron al equipo juvenil. Allí pasó tres años horribles e incluso se planteó dejar el fútbol, pero el Albacete le recuperó para la causa y fue uno de los mejores jugadores de Segunda en la 2014/15, lo que le permitió dar el salto a Primera de la mano del Eibar. 

Keko llega al Málaga con 24 años y con ganas de seguir progresando y mejorando. Lo pasó muy mal, pero su carrera y su vida dieron un giro radical que ahora le permite recalar en el ambicioso proyecto del equipo blanquiazul con Juande Ramos al mando.