Camacho: "El primer crítico conmigo soy yo"

Atendió a los medios de comunicación Ignacio Camacho y habló del momento que está atravesando en lo personal: "El primer crítico conmigo mismo soy yo. Siempre trato de dar lo mejor de mí, que en este caso pensáis que no es el máximo. Es una opinión de cada uno. Yo sé que podría mejorar y que debo mejorar en todos los conceptos. Pero no ahora, sino también en lo que vosotros llamáis mi mejor momento. Cuando va bien todos somos mejores y cuando va mal, pues evidentemente algo estamos haciendo mal".

Acerca del equipo, justifica en cierto modo la situación: "El míster, por los resultados, está intentando buscar esa tecla. No es el arranque idóneo y que todos esperábamos. Es un entrenador nuevo, con jugadores nuevos, con características diferentes y que tienen una forma de jugar. Hay que acoplarse, nosotros a ellos también. Todo tiene su proceso, nos está costando un poco más, pero no pasa nada, hay que seguir trabajando. El año pasado empezamos muy mal y se fue fortaleciendo".
Todavía colea el partido contra el Athletic. ¿Habría cambiado mucho si no expulsan a Balenziaga? Esto dice Camacho: "No lo sé, no soy adivino. No sé qué habría pasado. Desde luego que es una jugada que cambia el partido. Siendo uno más controlando el partido. La realidad es que nos ayudó".
Pero eso es pasado y al Málaga le esperan retos importantes. Uno es lograr no encajar goles: "Era muy importante para la confianza defensiva dejar la portería a cero en algún partido. Estamos pagando muy caro las llegadas de los rivales. Toda la plantilla somos partícipes de esos goles". Quién sabe si eso llegará con él de central: "Es circunstancial. Tenemos centrales de sobra. Es verdad que hay bajas. Si tengo que jugar de central lo haré encantado, pero soy medio. Si me lo dice el míster, encantado. Es una posición que también me gusta y lo haré lo mejor posible. Cuando vas perdiendo hay que acoplarse a todo. Si hay que subir, se sube y si hay que bajar, se baja".
Diego Llorente es uno de los más señalados. Camacho le defiende: "Creo que es una persona humilde y muy trabajadora. Un día le toca a él y otras veces a otros. La culpa del gol no fue suya, los goles son culpa de todo el equipo. Si el pase hubiese estado presionado, no hubiese pasado. Somos un equipo para bien y para mal".