Kuzmanovic llevaba seis años sin ser expulsado
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Zdravko Kuzmanovic fue expulsado en la segunda parte del Málaga-Athletic haciéndole un flaco favor a su equipo. Ciertamente, el serbio podría haberse ahorrado su reacción desaforada tras una amarilla clara, pero no es menos cierto que a Del Cerro Grande la sobró (y le suele sobrar) soberbia y mano izquierda con el futbolista, que segundos antes había reclamado una falta de Muniain que fue, que no se pitó, y que supuso el 1-2. Las pulsaciones se descontrolan en ciertos lances del partido y la sangre serbia le jugó una mala pasada al bueno de 'Kuzma'.
Y decimos al bueno de Kuzma, porque el futbolista blanquiazul no es ni mucho menos un jugador polémico ni con tendencia a ser expulsado, más bien al contrario. De hecho, es la tercera vez que abandona un terreno de juego antes de tiempo a instancias disciplinarias en toda su carrera. Y hablamos de una carrera de 380 partidos oficiales hasta la fecha, repartidos en doce temporadas y hasta en 14 competiciones diferentes. Se dice pronto.
Así que Kuzmanovic, que se retiró muy enfadado del partido, volvió a sentir el frío del vestuario en soledad mientras el gentío se enfocaba sobre el césped. Hacía nada menos que seis años que al jugador suizo con pasaporte serbio no le ocurría algo similar. Fue en febrero de 2011, en un Stturgart-Benfica de la Europa League y tras una dura acción en el descuento cuando el partido estaba ya visto para sentencia (0-2). Le cayeron entonces tres partidos. La otra expulsión del ahora jugador del Málaga fue también en las filas del cuadro alemán, en noviembre de 2009 ante el Hertha de Berlín y por doble amarilla (43’ y 85’).
El interés se centra ahora en conocer la sanción que le impone el Comité de Competición este miércoles, probablemente sólo un partido. Del Cerro no hizo sangre en el acta y no recogió ninguna de las expresiones empleadas por el jugador. De hecho, el haberle expulsado por doble amarilla lo libera de una sanción mínima de dos encuentros.
Es vergonzoso, como una temporada tras otra, los árbitros, descaradamente, benefician al Bilbao.
Ya, pero ayer estaba claro que el pésimo arbitro que nos tocó estaba como loco por desequilibrar el partido a favor de los vascos (como siempre), y no solo les regaló el segundo gol, tras una falta clarísima en el centro del campo que no quiso pitar, si no que ademas dejo al Malaga en inferioridad pocos minutos después, lo que pasa es que los leones este año son mas bien gatitos, llevan 3 años sin fichar y con una plantilla vieja para disputar 3 competiciones.