La Copa tampoco tuvo tirón en el palco

13.326 espectadores se dieron cita anoche en La Rosaleda. Una entrada muy pobre atendiendo a que 4.000 de esos aficionados acudieron con un invitaciones que el club repartió en varias acciones solidarias y sociales. Aunque buenos, fueron pocos los asistentes y se dejó evidenciar que, además del día laborable y de la mala hora, la Copa con este formato y a estas alturas interesa bien poco.

Pero no fue sólo en la grada donde se evidenció el poco interés que suscitó el partido. También en el palco, hasta los topes en las últimas citas del Málaga (y sobre todo de la selección...), y con numerosísimos huecos en la jornada copera de este martes. La primera fila, por ejemplo, presentó siete butacas vacías por ocho ocupadas, con los incombustibles consejeros consultivos al pie del cañón y acompañados por los directivos e invitados del Numancia y por los diputados Cristóbal Ortega y Fran Oblaré.
De la propiedad no acudió nadie, algo por otra parte habitual durante los últimos partidos y esta temporada en general. En la segunda, tercera y cuarta fila, sí hubo más ocupantes en las butacas, con los tres ejecutivos blanquiazules: Roberto Cano, Joaquín Jofre y Mario Husillos entre ellos. Mientras, en el resto de butacas del palco aledañas a esta zona más exclusiva, sobre todo la parte superior, los huecos sí se hicieron más evidentes y notorios (foto superior).