"Tenía la gran esperanza de que el Málaga fuese un SuperDépor"
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Se sinceró con Casillas
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Lanzó un 'dardo' a Al-Thani
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¿Por qué acabó entrenando con peto antes de la cuarentena?
Hace pocas semanas Míchel se refirió con cariño, en un directo en Instagram junto a Iker Casillas (ver vídeo superior), a su etapa como entrenador del Málaga CF. El madrileño, ahora en las filas del Pumas mexicano, fue de más a menos en el banquillo de La Rosaleda. Ese primer impacto fue total, reactivó a un equipo tocado e incluso se le hizo corta la temporada. Ahora, en una entrevista en The Coaches' Voice, Míchel ha vuelto a viajar al pasado para hablar de lo que supuso su llegada, su paso y su marcha del club de Martiricos.
"Llegamos en el puesto 16 y acabamos en el 11. La sensación era que había llegado al sitio adecuado en el momento idóneo, con la gran esperanza de que el Málaga fuese un 'SuperDépor' o un Villarreal en un corto espacio de tiempo. Sin embargo, no pudo ser, ya que la dirección del equipo tenía otros planes", cuenta Míchel, quien también deja un espacio para los días previos a su firma: "Tenía la posibilidad de ir a otros sitios. Incluso la noche anterior a firmar por el Málaga me llegó otra oferta del extranjero, pero tenía claro que quería entrenar al Málaga".
A Míchel le gustaba "el equipo, los jugadores" e intuía algo que luego terminó comprobando. "Es una ciudad futbolera al cien por cien, no lo dudé. Sabía que lo íbamos a hacer bien para salvarnos", rememora, sin olvidar el fin de su etapa en el club: "El último tramo fue duro. Desde el final de liga hasta que empezamos en agosto hubo muchas situaciones que insinuaban lo que iba a pasar después. Yo soy una persona bastante corporativa. No intento pasar por encima de nadie, ni entro en lo que hace cada uno en su parcela de trabajo. Pero sí que es cierto que cuando eres entrenador te das cuenta de que eres un globo al que todo el mundo quiere pinchar. Debes tener respuestas para todo. Aunque no te corresponda".
Las visitas de los jugadores en pretemporada
Así, tomó la situación con "calma y sensatez", ampliando su compromiso pese a la delicada situación del club gracias, en buena parte, a la gran conexión que mantenía con los jugadores: "No era fácil recibir en pretemporada la visita de los jugadores en tu habitación del hotel para decirte que no te fueras. Y no lo hice, porque era un compromiso que tenía con ellos. Aún intuyendo lo que podría pasar después, efectivamente finalizando mi etapa con el club a mediados de temporada".