Escassi, las disculpas y su futuro: "Muero por el Málaga y estaré siempre que el club quiera"

El malaguismo vivió uno de esos días que quedan en la retina, más húmeda que nunca por las lágrimas que dibujan el descenso virtual a Primera RFEF. El capitán del Málaga CF, Alberto Escassi, apareció por zona mixta con ojos llorosos y mirada perdida. Sabe que ahora las palabras sirven de poco, porque los hechos dicen que a ocho de la salvación y con nueve puntos en juego, pocas esperanzas quedan. Así que aprovechó para disculpar a su equipo y dejar una cosa clara: quiere continuar, sea en la división que sea.

"Quiero pedir disculpas y transmitir el agradecimiento a los aficionados por el viaje que han hecho, gastando su tiempo y su dinero. Fue una pasada, a pesar del 2-0 seguían animando. Entiendo los cánticos, entiendo que las palabras ya no calen porque son dos años de mensajes repetitivos", expresaba el paleño, consciente del dolor anímico de los alrededor de 700 aficionados que viajaron a Ponferrada.

Le ha sido complicado explicar el porqué de la situación de un equipo que apuntó al ascenso con demasiada ceguera y que en Ponferrada suspendió el examen más importante para lograr la salvación. ¿Qué ha ocurrido? "Un cúmulo de cosas. Lo tendremos que analizar cuando termine la temporada. No empezamos bien desde el principio y lo hemos arrastrado durante todo el año. Hemos estado todo el año jugando con presión y metidos en problemas".

Quedan tres citas: Mirandés, Alavés e Ibiza. "No queda otra que morir en estos tres próximos partidos. Estamos a ocho puntos, está muy muy complicado, pero hasta que las matemáticas no digan lo contrario tenemos que dejarnos la vida".

¿Se queda?

Para Escassi, la plantilla "tenía el convencimiento de sumar los tres puntos", sabían los resultados de Leganés y Villarreal B y "todavía era más necesario". Así analizó, grosso modo, el duelo ante la Ponfe:  "Tuvimos el partido controlado en todo momento. El gol fue una pérdida en banda que pilló a la defensa descolocada. El segundo, teníamos que ir todos arriba al balón parado y en un rechace y una contra nos metieron el segundo".

Hasta que llegó la pregunta sobre su futuro. ¿Se quedaría en el Málag si se confirma el descenso? "Yo voy a estar en el Málaga, muero por el Málaga y voy a estar aquí siempre que el club quiera". Su contrato expira el 30 de junio de este año 2023, por lo que el próximo director deportivo se tendrá que sentar con él para negociar. De momento, el malagueño quiere quedarse en las peores.