La pretemporada del Málaga empieza a perfilarse: fechas y plan de Pellicer

La locomotora del renovado Málaga CF está en marcha y ya empieza a vislumbrar los caminos que conducen al nuevo destino, la competitiva Primera RFEF. Este martes se conocieron los rivales y estadios que tendrán que visitarse, así como las fechas clave, con una señalada en rojo en el calendario: 26 y 27 de agosto, el estreno en la división de bronce.

Una vez se han despejado las incógnitas de la configuración de los grupos y el fin de semana del comienzo de la liga, el Málaga ya puede maniobrar en la planificación de una pretemporada que será austera, sencilla y diferente a las de otros años.

La fecha elegida por Pellicer para la vuelta al trabajo es el lunes 10 de julio, aunque pretende que algunos canteranos empiecen unos días antes para ir cogiendo ritmo y para que el propio técnico vaya estudiando sus cualidades, dado que la cantera tendrá un protagonismo capital.

El Málaga, por tanto, se entrenará durante siete semanas y lo hará alternando el Anexo y los campos de la Federación. No habrá stage de concentración a las afueras de la capital como en los veranos anteriores.

Amistosos y jornadas de convivencia

El club tiene la intención de disputar seis o siete amistosos que aún tiene que cerrar. Pellicer lo aclaraba en Málaga Hoy: "Poco a poco veremos el tema de los partidos, pero serán 6 o 7. Tengo marcados los perfiles de rival, cómo quiero empezar y cómo acabar. Luego sabemos que dependerá del tema de la logística y demás".

Confirmaba también los planes de la preparación estival: "De momento la pretemporada la vamos a realizar entre el Anexo y la Federación, no habrá stage", por lo que el club buscará soluciones para hacer piña y crear sinergias en una plantilla que deberá cuajar también en lo personal. "Habrá que aprovechar lo máximo, buscar jornadas de convivencia, porque va a ser un grupo nuevo y eso hay que tenerlo en cuenta".

Pellicer tendrá que gestionar esos tangibles e intangibles que se cuecen en las pretemporadas y que suelen dar sus frutos cuando el balón rueda. Todo influye en el vestuario y no todo se centra en organizar dobles o las famosas triples sesiones de entrenamiento que imponía Pablo Guede.

"Todo hay que meterlo en una coctelera intenta generar un ambiente sano y un sentimiento colectivo”, concluye el entrenador malaguista, ante el reto de una de las pretemporadas más importantes de los últimos años.