Pejiño, en la agenda del Sporting de Gijón para reforzar el ataque: un extremo que encaja en lo que pide Rubén Albés
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Pejiño, uno de los extremos que el Sporting tiene en su agenda
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La prioridad del Real Sporting en el mercado invernal está más que clara. Rubén Albés ya lo dejó caer en verano y, tras no cumplir con ello en la recta final del mercado estival, lo dejaron como 'deberes pendientes' para el de enero. El tan ansiado extremo encarador y vertical sería la 'guinda' a la plantilla, tal y como aseveró el técnico vigués en su momento.
A escasos tres meses de que abra el mercado invernal, la dirección deportiva rojiblanca parece que ya ha encontrado un jugador que encaja en sus deseos y que podría ser el regalo navideño para Rubén Albés. Tal y como informa el diario La Provincia el Sporting de Gijón ha puesto sus ojos en Francisco Jesús Crespo 'Pejiño', atacante de la UD Las Palmas.
El gaditano no entra en los planes de Diego Martínez. De hecho, no suele ni entrar en sus convocatorias. Y aunque tenga contrato hasta el 2026 el equipo amarillo no pondrá obstáculos a su salida.
Tras el cese de Luis Carrión el conjunto canario está experimentando una increíble resurrección de la mano del técnico vigués, llegando a ganar al FC Barcelona en Montjuic. Aunque ya hayan salido de la 'quema' confían en asentarse en la zona tranquila.
Para ello, los fichajes que puedan llevar a cabo en el mercado invernal son fundamentales, pero ya tienen todas las fichas ocupadas y la de Pejiño es una de las más sencillas de liberar, puesto que cuenta con mercado en la categoría de plata.
El posible encaje de Pejiño en el Sporting: dudas con su físico
A sus 28 años Pejiño ya tiene una amplia trayectoria en el fútbol profesional sobre sus espaldas. Tras ir quemando etapas en la cantera del Sevilla, a la que llegó en 2017, acabó debutando con el primer equipo de la mano de Pablo Machín.
En el verano de 2020 firmó con la UD Las Palmas donde dejó grandes actuaciones, especialmente hace dos temporadas, cuando regresaron a la máxima categoría. Pero su protagonismo decreció el curso pasado y este año ya es meramente testimonial: tan solo ha participado un cuarto de hora frente al Betis y salió de inicio frente al Ontiñena de Regional en la primera ronda de Copa.
Aunque sus características técnicas encajan dentro de los parámetros que busca Rubén Albés, hay dudas sobre su estado físico tras medio año sin acumular ritmo competitivo. Además, las lesiones también le han lastrado, por lo que hay ciertas reticencias con su adaptación a un fútbol tan intenso como el que propone el técnico vigués y en el que hay que estar al cien por cien para hacerse un hueco en el once.
