El fútbol y el judo, las aficiones que Sun Quiñones comparte con su hermana gemela

Mariasun Quiñones 'Sun' (Hondarribia, 29 de octubre de 1996) es una de las jugadoras importantes de la plantilla de la Real Sociedad e internacional absoluta con España en el Mundial de Francia 2019. Con tan solo 22 años puede considerarse una de las 'veteranas' del vestuario txuri urdin y ya fue convocada hace dos años para la Eurocopa de Holanda.

Detrás de su currículum deportivo y de su gran proyección se esconde una persona trabajadora. Sincera, siempre con una sonrisa en la cara, nos cuenta en ElDesmarque la afición de su familia por el deporte. Tiene una hermana gemela que es campeona de España de judo con la que comparte la afición por ese arte marcial y por el fútbol. Ambas son cinturón negro, pero un día tuvieron que decantarse por uno. También sus tíos tienen un amplío currículum en distintos deportes.

¿Cómo está el equipo de estos días de descanso?

"Ya pensando en entrenar, en afrontar ese partido tan importante que tenemos el lunes. Estamos tranquilas, recuperándonos. Pasar a octavos ha sido un hecho único, histórico. Ahora toca volver a trabajar, volver a la realidad, trabajar y pensar en el rival que nos toca".

¿Cómo estás viviendo este Mundial?

"Es una experiencia única, muy pocas jugadoras tenemos el privilegio de poder vivirlo. Lo estoy disfrutando al máximo, en cada entrenamiento, en cada charla que tenemos las compañeras, en cada café... son momentos únicos. Hay que vivirlo al 100% y así lo estoy haciendo".

¿Cuándo empezaste a tener el primer contacto con el balón?

"Desde muy pequeña. Tengo una hermana gemela y una hermano mayor y hemos podido jugar al fútbol toda la vida. Desde pequeñitas, en la plaza ya salíamos con el balón entre las piernas a jugar. Tenemos un campo de fútbol en el barrio y salíamos a jugar. También con todos los compañeros del colegio en el patio. Y con mi tía Mila que hacíamos toques y salíamos a jugar".

¿Cuándo decidiste que realmente querías dedicarte al fútbol?

"Tuve que decidir porque hacía judo y hacía fútbol a la vez. No sé a qué edad tuve que decidirlo. Con 14 años ya tenía claro que mi pasión era el fútbol y sobre todo la portería".

¿Siempre has sido portera?

"Desde pequeñita he sido portera. Me ha gustado estar debajo de la portería, entre los palos. En las dos primera temporadas lo compaginaba con ser central, pero tras haber disputado algunos partidos de central ya dije que lo mío era la portería".

¿Qué has tenido que sacrificar por el fútbol?

"Se sacrifican muchas cosas, pero al final es lo que te gusta. Es tu pasión, es por lo que vives. Sacrificamos muchas horas diarias. Además de ser un sacrificio es una inversión. A mí me gusta entrenar, me gusta jugar al fútbol, me gusta convivir con mis compañeras... En mi rutina diaria pienso en fútbol, pienso en cómo poder mejorar. Al final de los sacrificios como dejar de ir a una comida familiar, bodas... se ven recompensados por el cariño que esas personas muestran hacia nosotras".

¿Cuál es la clave para triunfar en el fútbol femenino?

"Trabajar. Tener la mentalidad de esa mejora continua día a día. Entrenar, ver cómo entrenas, autoanalizarte. Ver los videos, los errores que cometes, ver lo que haces bien para que en la siguiente jugada puedas hacerlo mejor. El progreso y el hecho de analizar y observar tu actuación es lo que hace mejor".

¿Tu hermana gemela también es deportista?

"Empezamos haciendo fútbol y judo. Judo un poquito antes porque empezamos más jóvenes. Ella luego le dedicó un poco más de tiempo al judo, aunque nunca dejo el fútbol. Siempre siguió con el judo, fue campeona de España y campeona en Copas de Europa. Al final decidió dejar el judo, nos sacamos el cinturón negro las dos, lo dejamos y seguimos con el futbol".

Vienes de una familia de deportistas...

"Tenemos la oportunidad en el norte de practicar bastantes tipos de deportes. Mis tíos han sido remeros. Hay un tío que ha sido tenista y entrenador de tenis. Mis tías han jugado al baloncesto y al fútbol. Mi madre hace deporte cada día. Al final que es verdad que tenemos esa costumbre de hacer deporte. Es un hábito muy saludable. No siempre hay que llevarlo a la élite, pero es verdad que hay que hacerlo en la vida cotidiana".

¿Cómo has pasado este tiempo que has tenido libre?

Desconectar un poco de la rutina de estar concentradas, de pensar en la pizarra, de analizar al rival. Salir de este entorno nos ha venido muy bien. Yo fui a Disney con varias compañeras. Hacía muchos años que no iba, me lo pasé como una niña y disfruté al máximo. Desconecté que era a lo que iba y ahora hemos vuelto con las pilas cargadas, que era en lo que consistía".