Heimir Hallgrimsson fallará a su costumbre
Moscú, 15 jun .- El seleccionador islandés Heimir Hallgrimsson fallará este sábado a su costumbre de reunirse con los aficionados antes de un gran partido. En los prolegómenos del duelo ante Argentina, un envite que considera "el más importante" en la historia del fútbol del país vikingo por ser el primero en el marco de un Campeonato del Mundo, cambiará su ritual.
"No, mañana no voy a ir a un pub", expuso en la rueda de prensa celebrada este viernes en el estadio Spartak de Moscú.
Un bar de Reikiavik suele ser el lugar de reunión de Heimir Hallgrimsson con los seguidores islandeses. A ellos, suele desvelarles el 'once' del equipo y con ellos comparte el día a día de una selección que, por su filosofía, ha seducido al mundo.
"A nosotros nos gusta estar en contacto con nuestros aficionados antes de los partidos. Quizás es más fácil porque somos un país pequeño. Con nuestros aficionados hemos establecido un vínculo de confianza y cercanía", abundó.
Él y los miembros del cuerpo técnico saben ya "quiénes jugarán mañana". "Lo hemos decidido ya, pero informaremos a los jugadores antes del partido", abundó en una multitudinaria rueda de prensa.
La sala estaba inusualmente rebosante de periodistas venidos de todos los rincones, porque inusual es que un país de unos 335.000 habitantes compita en un Mundial de fútbol.
"Y antes de que me lo preguntéis, sí, sigo teniendo mi clínica", se arrancó el carismático preparador islandés.
Además de seleccionador, Hallgrimsson es dentista.
Todas las particularidades que rodean al combinado vikingo han hecho a la selección islandesa una de las más seguidas por los medios internacionales a pesar de no figurar entre los candidatos.
"Creo que a la gente le gusta que un país con tan pocos habitantes haya llegado a una Copa del Mundo. Además, no hemos estado en guerra con ningún país del mundo y somos bastante guapos, ¿no?", bromeó.
Tanto él como Aron Gunnarsson, quien compareció junto a él, responden al arquetipo islandés, aunque las alusiones al físico se quedaron en esa frase.
Los apuntes sobre el capitán fueron otros: "Aron es un jugador muy, muy valioso. Hemos tenido que jugar sin él y creo que se ha notado en el rendimiento del equipo. Él es muy importante en el equipo, sobre el terreno de juego y fuera del mismo. Tiene confianza y valor; es el que dirige el equipo. Le necesitamos en un partido tan importante como el que tenemos ante Argentina y agradezco su esfuerzo. Todos los entrenadores del mundo querrían tener a un jugador tan solidario, tan generoso y con tanto talento".
La definición de Aron Gunnarsson podría extrapolarse a cualquiera de los 23 jugadores islandeses, porque el esfuerzo y la entrega en el combinado islandés están coordinados al detalle, como el 'aplauso vikingo' que les fusiona con sus seguidores.
El 'trueno' no es una invención autóctona. Está inspirada en los cánticos de los aficionados del Motherwell escocés, a los que han agregado un '¡Huh!' que es atribuible a '300'.
Con ese grito desafiarán la alegría de la bancada celeste y blanca en una jornada histórica, el 16 de junio.
