El calor, un invitado no deseado en el partido del Betis

El calor fue uno de los protagonistas externos del partido que el Betis disputó este sábado contra el Alavés en el Benito Villamarín. La hora y las temperaturas que se están registrando a estas alturas del año provocaron que tanto los futbolistas sobre el césped, como los aficionados en las gradas, sufrieran los rigores de las temperaturas.

Al comienzo del partido se rozaban los 30 grados en el Benito Villamarín. Los aficionados más castigados por el calor fueron los de la grada de Fondo, a los que el sol dio poca tregua. Algunos tuvieron que se atendidos por golpes de calor, sin que hubiera problemas de gravedad, y en algunas zonas la alta demanda de agua en los servicios hizo que el suministro fallara en ciertas ocasiones.
El propio Quique Setién, entrenador del Betis, se refería al calor que se había vivido sobre el terreno de juego. "No sé si poner alguna excusa por la hora, por el calor, porque había muchos futbolistas a los que les he notado falta de frescura", ha dicho.