La columna vertebral recupera su forma

Con la entrada del próximo año, Quique Setién espera recuperar las sensaciones que tanto maravillaron a la parroquia verdiblanca a principios de curso. Una percepción que ha sido vejada por los resultados de los dos últimos meses, donde el Real Betis ha perdido coba en la lucha por colarse en puestos europeos además de ofrecer una imagen que dista mucho del atractivo juego que impone el técnico cántabro.

Una de las claves para ese retroceso de juego ha sido la perturbación que ha sufrido la columna vertebral, mermada en demasía con las lesiones de Andrés Guardado y Javi García. Una dupla asentada desde el inicio de curso que ha forjado el ancla, el timón y el pulmón del equipo. Un dueto que no disfruta junto sobre el terreno de juego desde la primera semana de diciembre y que no ha conseguido encontrar sustitutos ideales para paliar su ruptura, a pesar de las probaturas con Amat, Camarasa o Fabián.
No obstante, el parón navideño ha servido a los servicios médicos del club para ultimar la puesta a punto de los dos jugadores, que podrían estar disponibles para el derbi del próximo día seis de enero. El azteca se ha ejercitado con completa normalidad desde la vuelta de vacaciones y el de Mula se ha dejado ver este sábado por la ciudad deportiva a pesar de haberse mantenido al margen, aunque espera incorporarse antes de la cita ante el Sevilla.
Dos piezas claves que forjaron un entendimiento inédito en la medular del Villamarín y que esperan volver de la mejor manera, otorgando una alegría a la parroquia verdiblanca con un triunfo en el derbi.