Historias de la Semana Santa y el fútbol sevillano (XX): Fabao y el balcón de Lopera

Cuenta la leyenda que si el balcón de Manuel Ruiz de Lopera en la calle Sierpes hablara, muchos se echarían a temblar. Historias curiosas de béticos, entrenadores, jugadores y personas de cierta relevancia social que han visto los pasos de la Semana Santa sevillana desde una ubicación casi inigualable. Y uno de estos protagonistas fue Fabao, cuya presencia dio más de un sofocón al anfitrión. Vaya tarde de sufrimiento pasó Lopera.

El futbolista brasileño, que pasó por Heliópolis sin pena ni gloria, o con más pena que gloria, fue invitado al balcón y en sus ganas por agradar hizo todo lo contrario. Una anécdota que todavía provoca dolores de cabeza al expresidente del Betis. Fabao estaba estupefacto viendo pasar un nazareno tras otro y los pasos, sin perder detalle de lo que ocurría. Pero Lopera notó algo extraño en su jugador que al final se volvió en su contra.
Lopera quiso que el chico estuviera cómodo y le preguntó si le gustaba la procesión. La respuesta de Fabao llamaó tanto la atención que Lopera se marchó del balcón por no tirarse hacia abajo: "¿Eso tiene que pesar mucho, no?". Si la leyenda no mienta, Fabao no volvió a pisar más el balcón al que muchos quieren ir y pocos van cada año. Aún menos desde que Lopera ya perdió las llaves del Betis.