Las piezas del puzzle en el banquillo del Betis

El panorama del banquillo del Real Betis es incierto. A pesar de esa incertidumbre, existen varias cosas claras y alternativas varias en las que se están trabajando.

Rubi

En primer lugar, Rubi tiene las horas contadas si no vence en Granada. Después de un mes esperando la desvinculación del técnico del RCD Espanyol, en la parte noble del Betis tienen claro que el entrenador tiene que ganar para evitar la destitución. No obstante y ante el panorama tenso que se dibuja en la temporada (todo puede cambiar), la presidencia verdiblanca está deseando que el Betis de Rubi gane para así dilatar un poco más la estancia del entrenador en el cargo. Tomar decisiones, en estos momentos, no es lo que quieren los dirigentes del Betis.

Alternativas y deseos

Hay varias alternativas en el caso de que Rubi sea destituido y varios deseos. La presencia de Quique Setién en esa ecuación es real porque José Miguel López Catalán lo tiene presente. Ya en verano no quería que el cántabro se marchara. Sin embargo, tal y como ha contado este miércoles Haro, Setién no tiene tan clara que su vuelta al Betis sea positiva para él. Si finalmente se convenciera al exentrenador verdiblanco para que volviera (Setién cuenta con parte del apoyo del vestuario y de Marcos Álvarez), sería una apuesta de Catalán. Haro, en este sentido, se muestra más reticente.

Por esa reticencia del presidente del Betis se valora en el consejo el nombre de más entrenadores. El favorito es Javi Gracia. Ya ha habido sondeos, contactos y el técnico navarro lo ve con buenos ojos. Después de ganar muchos millones en su etapa fuera de España, la última en el Watford ganando unos 2,5 millones de euros netos al año, su ficha puede ser el principal inconveniente.

A partir del domingo se esclarecerá este mapa. Si Rubi, Haro y Catalán respirarán y el catalán matendrá su puesto. Si el Betis sigue en la línea de las jornadas anteriores, la maquinaria empezará a funcionar.