Condenado por sus propios errores (0-3)

No pudo ser. El Real Betis puso el broche final a esta peculiar pretemporada con un sabor un tanto agridulce. Los errores defensivos condenaron a un equipo valiente y que quizás mereció algo más, pero en esto del fútbol de élite los grandes no perdonan. La Atalanta (0-3), que apenas generó peligro más allá de los goles, hizo demasiada sangre a un plantel que desde ya pensará en ansiado ese regreso a la competición oficial.

Real Betis y Atalanta podrían haber medido sus fuerzas cien veces que solo en una, teniendo en cuenta lo visto sobre el terreno de juego, se habría marchado el conjunto visitante con ventaja al descanso. Difícil de entender el resultado de una primera mitad donde los de Manuel Pellegrini, lanzados arriba, tuvieron opciones claras de golpeo, pero la falta de efectividad arriba y un par de errores groseros le obligaron a remar a contracorriente desde el principio.

La puesta en escena resultó atractiva para el espectador. Un Betis atrevido, con ganas de contentar a los miles de aficionados que asistieran y con un dominio claro sobre la Atalanta, agazapada en su propio campo. El cuadro heliopolitano presentaba una propuesta valiente, sin efectividad en la toma de decisiones pero ejerciendo un claro dominio sobre el rival... aunque los errores se pagan caro ante equipos de élite.

Y al primer atisbo de duda, la Atalanta no perdonó. Ruggeri, muy activo en las coberturas por el carril izquierdo, llegó hasta línea de fondo y colgó al segundo palo un centro pasado que no encontró rematador. Sí que lo interceptó Álex Moreno, pero un errático despeje dejó el balón muerto en el corazón del área. Ahí apareció Muriel, quien al primer toque lo hizo imposible para Rui Silva.

El gol, lejos de inquietar la propuesta del Betis, espoleó a un equipo lanzado en busca del empate. Borja Iglesias buscó la réplica de inmediato con un disparo demasiado escorado. Hizo lo propio en segunda instancia, buscando sorprender a Musso con un disparo seco, pero Musso repelió el chut sin complicaciones.

El Betis se animaba y enganchaba a la afición, plagada de niños entusiasmados con sus ídolos... pero la moneda salió cruz de nuevo. Apenas en el segundo acercamiento de la Atalanta, los italianos volvían a evidenciar las carencias ofensivas del conjunto local. Luiz Henrique parecía llegar con ventaja a un duelo pero se confió, llegó forzado y perdió el balón por hacer una floritura difícil de entender en el balcón del área. Eso propició un nuevo centro al área que terminó con el 0-2 de De Roon.

Es ahí cuando entraron en escena Fekir y Rodri, alternando sus posiciones y dándole algo de verticalidad al juego del equipo. El canterano se mostró con ganas y estuvo muy participativo, acelerando el inicio de las jugadas y filtrando pases a las espaldas de las defensas... pero difícilmente había rematadores preparados. Eso obligó al Betis a reinventarse, con disparos de media distancia, como el que intentó Álex Moreno, y valiéndose del balón parado. De esta manera llegó la más clara. Un disparo a bocajarro de Borja Iglesias que difícilmente fallaría otro día. Hoy lo hizo. Nada salía de cara.

El paso por vestuarios hacía prever un Betis más enrabietado, con ganas de darle la vuelta al marcador, pero fue el rival quien salió más enchufado Y claro, si te relajas... lo pagas caro. Otra acción dubitativa de la defensa permitió a Éderson encontrar disparo y batir al palo largo a Rui Silva. Un 0-3 en el 47' que acabó con las esperanzas de esos miles de pequeños que asistieron a Heliópolis.

No le gustaba a Pellegrini lo que veía y movió el árbol introduciendo a cuatro futbolistas ávido de reivindicarse -Juanmi, Enrique, Joaquín y Miranda-. Unos minutos después hizo lo propio con Dani Pérez, Willian José y Camarasa, quien volvía a un terreno de juego 305 días después. Resultó ser esta la única noticia positiva del partido, pues el duelo murió sin más ocasiones de peligro. Un amistoso del que no se pueden sacar conclusiones definitivas, aunque sí que dejó en evidencia las carencias defensiva de un equipo obligado a ganar el jueves 29 si quiere empezar con buen pie el regreso a LaLiga.