Los seis segundos de Fran Vieites en Gante: qué dice la norma y los cambios que ensaya la IFAB

Corría el minuto 69 del partido que el Gante y el Real Betis Balompié disputaban en Bélgica cuando Horatiu Fesnic, árbitro rumano, pitó lo que prácticamente nadie pita. Fran Vieites, que debutaba en competición europea, retuvo el balón más tiempo del permitido y el conjunto local gozó de un libre indirecto en el área con 0-1 en el marcador que, por suerte para el portero gallego, acabó en nada. Segundos más tarde, Bakambu hacía el gol que sentenciaba prácticamente el partido.

Hasta 21 segundos estuvo Vieites con el balón en las manos, triplicando con creces los seis segundos permitidos por la norma, pero es cierto que es una infracción que no se pita prácticamente nunca.

Esta ‘falta’ está recogida en la Regla 12 del reglamento, concretamente en el apartado 2, que permite al guardameta controlar el balón con las manos durante seis segundos como máximo antes de ponerlo en juego. Según la IFAB (International Football Association Board), “un guardameta que controle el balón con las manos demasiados segundos, además de estar perdiendo tiempo, emplea una táctica desleal, puesto que el equipo adversario no puede disputárselo en esta situación y, por consiguiente, se queda sin la posibilidad de recuperar la posesión. Además, esta conducta suele provocar frustración entre los espectadores”.

"Sí, ha sido eso, ha pitado que habían pasado más de seis segundos. Es una decisón del árbitro, ahí ya no entramos. Yo no he interpretado que estaba perdiendo tanto tiempo, a lo mejor es una percepción. Sus motivos tendrá para pitarlo. Es una acción puntual de la que, sin duda, hay que aprender", reconocía el propio Fran Vieites tras el partido.

La IFAB estudia acabar con las pérdidas de tiempo

Pero lo cierto es que los árbitros no suelen señalar este tipo de infracciones, bien por la dificultad de gestionar un libre directo en el área, o bien porque la ‘pena’ da demasiada ventaja al equipo ejecutor.

Así las cosas, la IFAB está comprometida a acabar con las pérdidas de tiempo de los porteros, por lo que está estudiando cambiar esa norma para que se pite más, reduciendo la relevancia de la sanción.

Por un lado, ampliaría el periodo a los ocho segundos, y por otro, la infracción no sería tan peligrosa. En concreto, propone cambiar el libre indirecto dentro del área bien por un saque de esquina, o bien por un saque de banda a la altura del punto de penalti y en la banda más cercana al lugar donde se comete la infracción. Además, el árbitro avisaría con la mano con una cuenta atrás de cinco segundos, al estilo de lo que sucede en fútbol sala, y en caso de reincidencia el portero verá una tarjeta amarilla.

Esta norma se está ensayando ya en partidos de la liga de Malta, la Premier League sub-21 o el Campeonato italiano sub-20. Patrick Nelson, director ejecutivo de la Asociación de Fútbol de Irlanda y miembro de la IFAB, cree que “con el cambio no hay fallos, lo que queremos en este momento es que los porteros den más velocidad al juego”.

Es tan poco común que se señale esa falta, que hay que bucear mucho en las hemerotecas para encontrar algo similar. Por ir a lo más cercano, le pasó al Sevilla FC y al Sevilla Atlético en el mismo lugar, con 16 años de diferencia. En 2001, a Antonio Notario se lo señaló Iturralde González en La Romareda ante el Real Zaragoza, provocando el gol de Esquerdinha para los locales. En 2017 le sucedió al filial en el estadio aragonés, esta vez con Fabrice Ondoa como protagonista, y Edu García como goleador.