Muere el Papa Francisco: el curioso paralelismo con los últimos títulos del Betis

El mundo se ha despertado este Lunes de Pascua con la noticia de la muerte del Papa Francisco. El Vaticano ha informado a primera hora de la mañana del fallecimiento del Santo Padre, y desde entonces se suceden las reacciones desde todas las partes. Además, recordando el amor por el deporte del Sumo Pontífice argentino, ha vuelto a salir a la palestra una curiosa correlación entre el fallecimiento de los últimos papas y los éxitos del Real Betis Balompié.

Los últimos tres títulos del equipo verdiblanco se dieron en años en los que murieron los máximos representantes de la Iglesia Católica en el mundo. En 1977, el equipo que entrenaba Rafael Iriondo ganó la Copa del Rey el 25 de junio, al Athletic Club en la tanda de penaltis, y el Papa Pablo VI murió poco más de un año después, en agosto de 1978.

Más cercana estuvo la muerte del Papa Juan Pablo II al siguiente título del Betis, ya que el polaco falleció el 2 de abril de 2005, apenas dos meses y poco antes del 11 de junio, el día en el que los verdiblancos vencieron al CA Osasuna en la prórroga en la finalísima disputada en el estadio Vicente Calderón, el mismo escenario de su anterior título 28 años antes.

Para seguir con esta correlación, en 2022 el club heliopolitano volvió a alzar la Copa del Rey, esta vez venciendo al Valencia CF en la final disputada en La Cartuja. En la tanda de penaltis un 23 de abril, el Betis se proclamó campeón. Meses después, el 31 de diciembre, fallecía el Papa emérito Benedicto XVI, quien había renunciado a su cargo nueve años antes.

El fallecimiento de Francisco y la UEFA Conference League

Así las cosas, es inevitable que el beticismo haga el paralelismo con el fallecimiento del Papa Francisco, el primer sudamericano de la historia que ha ocupado el sillón de San Pedro. El equipo de Manuel Pellegrini se encuentra inmerso en la pelea por la UEFA Conference League, competición cuyas semifinales disputará en los primeros días de mayo ante la Fiorentina italiana, con la idea de estar el próximo 28 de mayo en Breslavia para jugar la final, probablemente ante el Chelsea inglés.

Exceptuando el breve Juan Pablo I -que también murió en 1978 como Pablo VI apenas 33 días después de comenzar su pontificado-, el fallecimiento de los últimos papas que han permanecido durante bastante tiempo en el cargo ha sido cercano en el tiempo con los últimos títulos del Betis. Es imposible no hacer ese paralelismo.