Valentín Velikov, el médico del Ludogorets que salvó la vida de Christian Eriksen

El Ludogorets, próximo rival del Real Betis en la Europa League, tiene el privilegio de tener como jefe de los servicios médicos a Valentin Velikov, uno de los hombres que le salvó la vida a Christian Eriksen durante la Eurocopa 2021. El doctor resucitó con intervención cardiopulmonar al danés, colapsado durante partido contra Finlandia en el pasado 2021.

Esa edición pasará a la historia no solo por lo futbolístico, sino por el episodio que se vivió el 12 de junio, cuando Eriksen se desplomó por un fallo cardíaco. La rápida intervención de su compañero y capitán Simon Kjaer, así como del equipo médico y colegiados del encuentro, ayudaron a que el danés saliera con vida del estadio.

Valentin Velikov, el ángel de la guarda de Eriksen

El uso de un desfibrilador fue fundamental para reanimar a Eriksen, que salió del campo en camilla, consciente y con oxígeno para ser trasladado al hospital y continuar con la recuperación y la realización de más pruebas. Velikov, uno de los médicos oficiales en la Sede de la UEFA, fue reconocido junto a Simon Kjaer y los médicos daneses con el Premio Presidente de la UEFA 2021.

"Fuimos llamados al campo tan pronto como Christian cayó. No lo vi, pero estaba bastante claro que había perdido el conocimiento. Cuando llegamos a él estaba de lado: respiraba y le sentí el pulso. Pero de repente no hubo más latidos y, como todo el mundo pudo ver, comenzamos el masaje cardíaco", llegó a decir uno de los médicos en la rueda de prensa posterior al partido.

Herido por ultras rivales

Unos meses más tarde, el médico volvió a ser noticia, aunque esta vez por un hecho muy desafortunado. Todo ocurrió en un partido contra el CSKA de Sofía, cuando Valentin Velikov sufrió una herida en el muslo por un petardo lanzado desde las gradas durante un partido de la liga búlgara.

"A consecuencia de arrojar petardos y pedazos de hormigón cortantes contra el banco de Ludogorets, los tres resultaron heridos y es una suerte que el incidente terminara solo con heridas sin consecuencias graves para la salud y la vida de los tres", señalaba el club.

Tras el anuncio de Ludogorets, la Unión Búlgara de Fútbol sancionó al CSKA a jugar un partido sin público y a una multa total de 40.800 levas (20.400 euros) por el uso prohibido de antorchas y pirotécnica, el lanzamiento de petardos y otros objetos y por cánticos ofensivos y obscenos de parte de su hinchada.