Cristiano instala la paz tras asegurar su continuidad

Cristiano Ronaldo puso punto final a una etapa de marejada en el Real Madrid, afectado por una plaga de lesiones, el asunto extradeportivo de Karim Benzema y la alineación indebida de Denis Cheryshev en Copa del Rey, con un póquer de goles al Malmoe y un mensaje de futuro asegurando su continuidad de blanco.

Más estabilidad aún que las cinco victorias consecutivas que protagoniza el Real Madrid tras un Clásico que dejó herida, dan las declaraciones del líder del equipo, Cristiano Ronaldo, que de un plumazo ha fulminado todas las especulaciones sobre su futuro: "Tengo contrato dos más años en el Real Madrid, me voy a quedar aquí".
Es la contundencia que el madridismo pedía a su máximo referente y que había faltado en varias comparecencias, especialmente con medios extranjeros, que habían alimentado una corriente de duda que creció con su guiño al hablar al oído al técnico del PSG, Laurent Blanc, o el cariño con el que trató al jeque dueño del club.
Tras inscribir su nombre en un nuevo récord y conseguir marcar once dianas en la fase de clasificación de la Liga de Campeones, Cristiano atendió feliz a los medios y no esquivó ningún tema. "Han pasado muchas cosas raras: las lesiones, el problema de Karim o lo de Cádiz que no es bueno para la institución. Todo viene en contra todo estamos mejorando y llevamos cinco victorias consecutivas", argumentó.
Todo pasa a un segundo plano con una goleada que el Real Madrid necesitaba, al fin un partido completo de inicio a fin, con un hambre insaciable de goles y sin levantar el pie del acelerador. Lo habían tenido ante el Shakhtar, pero la ventaja de cuatro tantos invitó a la relajación en el segundo acto y al sufrimiento final en Lviv (3-4), y lo habían repetido frente al Getafe, con un 4-0 al descanso que no tuvo continuidad y la desgana tras la reanudación no terminó de curar las heridas del Clásico en la afición.
La reacción del Real Madrid tiene un estadio marcado a rojo en el calendario, El Madrigal. El duelo contra el Villarreal confirmará si la recuperación es real o el equipo de Rafa Benítez sufre una recaída. De momento, cura parte de sus males, la enfermería se va vaciando y tan sólo quedan en ella Dani Carvajal y el francés Raphael Varane. Sergio Ramos regresará y Marcelo ya ha vuelto.
Antes lo hicieron jugadores que cambian la cara ofensiva del equipo de Benítez y lo instalan en números de récord. El colombiano James Rodríguez, clave en el dinamismo del juego, y el francés Karim Benzema, que con cinco goles en sus dos últimos encuentros de titular, encuentra los mejores guarismos de su carrera en un inicio de temporada.
Pero el líder sigue siendo Cristiano. El futbolista capaz de alejar la tempestad con sus declaraciones e instalar la paz con sus goles. Ha marcado 50 dianas en 49 partidos de blanco en 2015 y por primera vez firmó un póquer de goles en un encuentro de Copa de Europa. En el Real Madrid, sólo lo habían conseguido leyendas como Alfredo Di Stéfano o Puskas y un 'matador' como Hugo Sánchez.
Cristiano vuelve a sonreír. No lo hizo en el duelo ante el Malmoe hasta que no firmó su tercer gol para firmar un nuevo récord. Con cuatro aumenta la distancia sobre su gran rival, el argentino Lionel Messi, en la clasificación histórica de goleadores. 88 goles en 121 encuentros, por 79 del astro del Barcelona al que hoy le llega el turno de réplica.
En las clasificaciones de goleadores del Real Madrid ya reina Cristiano. 334 goles en 319 partidos en total, dejando ya lejos los 323 de Raúl o los 307 de Di Stéfano. 73 dianas en Liga de Campeones por 66 de Raúl y 49 de 'la Saeta' rubia.
El portugués está en otra dimensión pero hace pocas fechas aguantó silbidos de su afición en acciones en las que no estuvo acertado en el terreno de juego. Se le valorará más cuando ya no esté, pero de momento, dejó claro, que su futuro es blanco.