Así jugará Zidane: la revolución (y la sorpresa) en el once del Real Madrid

Zinedine Zidane lo anunció en el tramo final de la temporada pasada. El técnico adelantó que en su nuevo proyecto aplicaría sistemas de juego alejados del 4-3-3 con el que triunfó en su primera etapa. Entonces el galo estaba condicionado por la presencia de la BBC. Pero ahora está construyendo una plantilla a su gusto y su nuevo proyecto pasará por un cambio de sistema.

Los fichajes realizados para la campaña próxima apuntan a ello. La polivalencia de Eden Hazard o el tener un punta versátil como Jovic son buena prueba de ello. Le permitirán variar el sistema de un 4-3-3 a un 4-4-2, con Hazard en la banda y Jovic y Benzema en ataque. O incluso un 4-1-3-1, con el belga o el serbio en la media punta.

Lo que está por llegar al Real Madrid

Pero todavía quedan uno o dos fichajes de peso por llegar. Uno de ellos es el relevo de un Gareth Bale al que Zidane no quiere ver ni en pintura cuando empiece la pretemporada. Así se lo ha pedido a Florentino Pérez.

Un crack de perfil ofensivo para ocupar la banda derecha, que pueda actuar tanto como extremo como de media punta. Sadio Mané del Liverpool es uno de los que suenan para el puesto.

El otro tiene que ver con la medular. Una posición para la que Zidane quiere a Paul Pogba, aunque como recogía El Demarque, Christian Eriksen, Van de Beek y Tanguy Ndombélé también están en la lista.

El nombre que finalmente ingresará en las filas blancas se desconoce, pero no las intenciones que tiene Zizou para con él. Y estas pasan por ese cambio de sistema que pretende perpetrar Zidane en el sistema.

Sorpresa en el nuevo sistema de Zidane

Una de las preocupaciones que le ha quedado al míster de los once partidos que estuvo al frente del conjunto blanco en los últimos meses del curso y de lo que vio de los blancos tras su salida el pasado verano fue la facilidad con la que el equipo encajaba goles. La fragilidad en la zaga ha sido una constante esta temporada y el entrenador francés quiere acabar con este problema recurriendo al doble pivote.

El agotamiento de Casemiro, Luka Modric y Toni Kroos la temporada pasada fue una evidencia y el míster se plantea sumar un efectivo al mediocentro defensivo para dar aire a sus efectivos y que estos lleguen en condiciones al tramo final de la temporada.

Y no solo eso: podrá prescindir de la titularidad de alguno de ellos, lo que también le ayudará a gestionar el esfuerzo de cada uno de ellos.