Phil Foden ya ha mostrado su enfado con la directiva del Manchester City. Hace pocos meses, aceptó renovar su contrato, el cual expiraba en 2020, hasta 2024. Pero le prometieron que sería una pieza importante en el equipo y que tendría minutos y continuidad. Querían, y quieren, que sea el relevo de un David Silva que ya ha anunciado su marcha el próximo verano.
Jadon Sancho, de su misma edad, y con el que compartió categorías inferiores en el Etihad Stadium y la selección, ya es una estrella. Juega cada partido en el Borussia Dortmund y es internacional absoluto. Lo mismo que otro jugador nacido en el año 2000, Callum Hudson-Odoi, al que solo una lesión le ha impedido tener más minutos en el Chelsea.
Foden está muy disgustado y, si las cosas no cambian, como todo hace indicar, se plantea un cambio de aires. Ofertas le lloverán, eso seguro. Pep Guardiola intenta pedirle paciencia, pero con Ilkay Gündogan, Kevin de Bruyne o Silva por delante, no puede creerle.
Pueden perder a su gran joya.
Florentino Pérez ya está al día y puede dar un golpe de efecto con su fichaje. Tiene lagunas en el centro del campo, donde hay muy poco efectivos, y sí le puede garantizar oportunidades. El presidente del Real Madrid ve en él al ‘nuevo Andrés Iniesta’.
Aunque, para ello, deberán de pelear con Liverpool, Bayern de Múnich, Borussia Dortmund, Napoli, Juventus o Leipzig. También con el City, que afirmó que no le dejaría salir ni por 500 millones de euros.
Pero Foden incluso está dispuesto a declararse en rebeldía y pedir el ‘transfer request’.