El Madrid, a salvar el muro berlinés para obtener una victoria balsámica
Madrid, 31 oct (EFE).- El Real Madrid necesita una victoria balsámica ante el Alba Barlín, en el segundo acto de la primera jornada doble de la Euroliga, salvar el muro de este partido y romper la racha de tres derrotas consecutivas fuera de casa que le está poniendo en entredicho.,Será un duelo de necesidades, porque el Alba, entrenado por el español Aito García Reneses, acumula cuatro derrotas consecutivas y tampoco está en su mejor momento.,Si el Madrid puede aducir que sus tres derrotas han
Madrid, 31 oct .- El Real Madrid necesita una victoria balsámica ante el Alba Barlín, en el segundo acto de la primera jornada doble de la Euroliga, salvar el muro de este partido y romper la racha de tres derrotas consecutivas fuera de casa que le está poniendo en entredicho.
Será un duelo de necesidades, porque el Alba, entrenado por el español Aito García Reneses, acumula cuatro derrotas consecutivas y tampoco está en su mejor momento.
Si el Madrid puede aducir que sus tres derrotas han sido lejos de casa y que en la Euroliga cada vez está más caro ganar a domicilio, el Alba puede poner sobre el tapete que su calendario está siendo cruel con sus intereses y que sus derrotas llegaron en casa del Anadolu Efes y Barcelona y en la capital alemana ante CSKA Moscú y Armani Milán.
Además, el equipo de García Reneses supera al Madrid en puntos por partido, rebotes totales, porcentaje de tiro de tres y es el mejor equipo de la competición repartiendo asistencias. Sólo el porcentaje de canastas de dos puntos parece su talón de Aquiles porque ocupa el último puesto entre todos los equipos.
El base estadounidense Peyton Siva y el alero lituano Rokas Giedraitis son las máximas figuras del equipo alemán, que también cuenta con el estadounidense Tyler Cavanaugh, el alemán Niels Giffey, el camerunés Landry Nnoko y el también estadounidense, y viejo conocido del baloncesto español, Luke Sikma entre los destacados.
El Madrid volvió a mostrar en Múnich, ante el Bayern, las mismas carencias que en Kaunas ante el Zalgiris y en Estambul ante el Anadolu Efes. Mala defensa, pocas ideas en ataque en el perímetro y falta de continuidad. Sólo arreones individuales le salvaron de cosechar derrotas más abultadas en sus salidas.
En esta ocasión, además, el equipo madridista no pudo volver tras el partido y tuvo que hace noche en la capital bávara por el cierre nocturno del aeropuerto muniqués, con lo que se suma el cansancio, la falta de entrenamientos y la poca o escasa recuperación física de cara al partido contra el Alba Berlín.
El bajo estado de forma de muchos de los jugadores que estuvieron en el Mundial -quizá se salven el argentino Gabriel Deck y Sergio Llull- y del caboverdiano Walter Tavares, además de las lesiones de Felipe Reyes y Salah Mejri están pasando factura al rendimiento del equipo.
Pablo Laso, entrenador del Real Madrid, dudó hasta última hora si incluir a Trey Thompkins entre los expedicionarios a Múnich, y volverá a pensar si lo activa de cara a la visita del Alba, aunque parece claro que no se puede echar sobre los hombros del ala-pívot estadounidense toda la responsabilidad porque estará falto de ritmo después de más de un mes sin disputar partido alguno.
Lo que está caro es que el Madrid necesita ganar para que no se enciendan las primeras luces de alarma. Estamos en los comienzos de la competición y los aficionados se sobresaltan al ver la clasificación, por mucho que se sepa que la Euroliga es larga y que a partir del mes de febrero es cuando hay que estar a tope.
Ya hace dos temporadas el Madrid encadenó una racha de una victoria y seis derrotas y acabó siendo campeón en Belgrado, pero eso no consuela a nadie.
Lo menos malo de la última derrota fue el debut en Euroliga de Usman Garuba que a sus 17 años fue uno de los mejores y acabó con 12 puntos y 20 de valoración.
Y tras ganar al Baxi Manresa el pasado domingo, perder en Múnich el miércoles, jugar contra el Alba este viernes, todavía le quedará al Real Madrid viajar a Vitoria en Liga Endesa para medirse al Baskonia. Todo un planazo.