Va a ser la despedida más dolorosa del Real Madrid, pero no quiere aceptar la oferta de Florentino Pérez

El Real Madrid se prepara para la salida de otra de sus leyendas este verano. Porque Nacho Fernández merece ser considerado como tal, y debe de estar a la altura de los Isco Alarcón, Marcelo Vieira, Gareth Bale, Iker Casillas, Sergio Ramos o Cristiano Ronaldo, otros iconos del club que abandonaron la institución en los últimos años. El canterano finaliza contrato en el mes de junio, y parece difícil pensar que vaya a renovarlo.

Y no por qué Florentino Pérez no desee que se quede. De hecho, tanto el presidente como Carlo Ancelotti han hablado con el polivalente zaguero para que siga otra campaña más, sin embargo, es él quien ha rechazado esta posibilidad. Así lo cuentan en el diario ‘Sport’, donde se hacen eco del enorme descontento que tiene con su pérdida de protagonismo desde la llegada de Antonio Rüdiger, que le ha relegado a un discretísimo segundo plano.

Ha perdido su espacio en el equipo, y prácticamente no ha jugado nada este curso. A estas alturas, y en comparación con el año anterior, en el que sí fue una pieza importante y jugó algunos encuentros de máxima exigencia, el internacional español acumula 611 minutos menos y seis partidos como titular menos. Una muestra de que ya no es protagonista en las rotaciones de ‘Carletto’. Y a poco de cumplir los 33 años, ha llegado a la conclusión de que necesita irse.

Nacho sigue siendo un futbolista cotizado y solicitado gracias a su experiencia, su regularidad y su capacidad para actuar en cualquier puesto de la retaguardia. Y en la gran mayoría de clubes sería titular habitual, siendo colocado insistentemente en la órbita de Valencia, Sevilla, Villarreal, Real Sociedad o Real Betis Balompié, por poner solo algunos ejemplos. De modo que vive sus últimos meses en el Santiago Bernabéu, antes de despedirse definitivamente.

Florentino Pérez ya se ha hecho a la idea de que no podrá retener a Fernández, y que tendrá que encontrar a un recambio, una tarea complicada. Porque jugadores como él cuesta mucho encontrarlos.