Después de la explosión de emociones por otra remontada del Real Madrid tras clasificarse a la final de la Liga de Campeones, el conjunto blanco tiene por delante 22 días hasta el partido en Wembley con varios deberes por delante, empezando por celebrar con su afición la 36ª Liga conseguida el pasado sábado y proseguir así con el momento de euforia que vive el equipo de Carlo Ancelotti.
Además, en el camino hasta Wembley, el Real Madrid tiene por delante cuatro partidos de LaLiga EA Sports en los que su objetivo será meter en ritmo a jugadores salidos de lesiones de larga duración, como Thibaut Courtois y Éder Militao, y recuperar el mejor estado de forma de futbolistas como Jude Bellingham.
El primer paso será celebrar la 36ª Liga. Un festejo que se aplazó el pasado sábado al estar centrados en el partido de vuelta de las semifinales de Liga de Campeones contra el Bayern. Y ahora, conseguido el objetivo de estar en la final, llega el turno de celebrar el trofeo y también el pase a la final de Wembley. Una reunión con sus aficionados que Carlo Ancelotti ansía, según comentó en la rueda de prensa tras la remontada frente al Bayern Múnich.
"Si pienso hasta la final, lo vamos a pasar muy bien todos. Pido hora para ir a Cibeles, porque hay una felicidad que contagian este ambiente y los jugadores", aseguró.
Celebración que arrancará el domingo a las 9:30 horas CEST (-2 GMT) en la Ciudad Deportiva Real Madrid de Valdebebas, con Pedro Rocha, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), entregando el trofeo al conjunto blanco.
Media hora más tarde, jugadores y cuerpo técnico del primer equipo junto a la directiva acudirán a la Comunidad de Madrid y Ayuntamiento tras lo que, a las 12:00, una vez cumplidos los compromisos con las autoridades, poner rumbo en un autobús descapotado a Cibeles, donde se espera el fin de fiesta a las 14:00.
Un Real Madrid que ha ganado la Liga y se ha metido en la final de la Liga de Campeones superando adversidades en forma de lesiones graves. Y dos de ellos, Courtois y Militao, podrían tener su cota de importancia en una final en la que, con un mes ya de rodaje en sus piernas, serán otra alternativa en los planes de Ancelotti.
"Yo me he visto muy bien. Es acostumbrarse. El plan era jugar un amistoso en marzo, pero me rompí el menisco. No había hecho un partido once contra once en nueve meses. He leído bien el espacio; no se me ha olvidado (bromeó). En los pases largos sí que tienes que acostumbrarte un poco", analizó el portero belga sobre su encuentro tras la victoria 3-0 contra el Cádiz.
Un buen rendimiento que abrió la duda sobre si podría ser titular en una posible final de ‘Champions’, que el miércoles se hizo realidad, y que Ancelotti no cerró. El italiano confirmó a Lunin en la vuelta de semifinales contra el Bayern, pero no quiso pensar en un portero titular para la final, aún sin tenerla en el bolsillo, y se refirió a Courtois como que “necesita tiempo” para alcanzar su mejor nivel.
Un ritmo competitivo tras el alta médica que al ser portero requiere de menos tiempo que Militao. Los cuatro partidos que restan de LaLiga EA Sports servirán a Ancelotti para darle continuidad a Militao y ganar opciones de cara a la final, con David Alaba descartado por la lesión de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda que sufrió el diciembre que deja a Rüdiger y Nacho como únicos centrales sanos de la primera plantilla; con la opción de retrasar a Tchoauméni si finalmente se recupera de la lesión, algo que está en seria duda.
El centrocampista inglés Jude Bellingham ha sido uno de los mejores jugadores del Real Madrid esta temporada. Un inicio fulgurante, con 14 goles en 15 partidos, pero un 2024 en el que le está costando encontrar esa versión.
Más allá de los ‘solo’ cinco tantos este año -de agosto a diciembre 2023 marcó 17-, al no tener que exigir a un centrocampista números excelsos de un delantero, Bellingham parece llegar justo al tramo final de la temporada.
Su tanto en el clásico del 21 de abril contra el Barcelona rompió una racha de dos meses y medio sin marcar con el Real Madrid; en los que fue baja por lesión y por sanción y disputó siete encuentros.
Además, Bellingham arrastra problemas en el hombro izquierdo desde noviembre y ha visto modificada su posición en varios encuentros; pasando de ser un centrocampista con gran facultad para llegar al área, a ocupar la posición de falso ‘9’, perdiendo esa capacidad de sorprender y de juego de cara a portería que tanto rédito le ha dado en su primera temporada en el conjunto blanco.
Una campaña de debut que cerrará contra su exequipo, el Borussia Dortmund, en una final de la ‘Champions’ en la que se puso el reto de imitar a su ídolo, Zinedine Zidane. Palabras mayores: "Zidane es mi inspiración y me encantaría hacer lo que él hizo en la final de la Champions con el Madrid", comentó tras el pase a la final.
Un objetivo para el que necesitará recuperar su mejor estado de forma, con 22 días por delante junto a cuatro partidos en los que Ancelotti y Antonio Pintus, preparador físico del Real Madrid, planificarán a medida los esfuerzos de cada jugador.