El toque de atención de Hierro a Lucas Torró

El técnico del Real Oviedo, Fernando Hierro, ha demostrado durante toda la temporada que los futbolistas de la primera plantilla no deben relajarse y acomodarse en el puesto, a excepción del portero Juan Carlos, que es el único futbolista que ha disputado todos los minutos ligueros. De hecho, el entrenador malagueño tomó la decisión este domingo en Anduva de dejar en el banquillo a uno de sus fijos, Lucas Torró.

 
El centrocampista alicantino es uno de los futbolistas de confianza de Hierro, pues lo conocía del Real Madrid Castilla y él mismo recomendó su fichaje en el mercado veraniego. La confianza del técnico carbayón en Torró es tal el que el pivote sólo se había perdido dos encuentros en la temporada frente al Reus y ante el Mallorca, ambos por lesión. Unos datos que le sitúan como el jugador de campo del Real Oviedo que más ha jugado en el curso en la competición doméstica con un total de 1.996 minutos.
Pero Lucas Torró dejó de ser indiscutible este domingo en Anduva. Cuando Hierro dio a conocer el once carbayón, la gran noticia no era otra que la suplencia del ex del Castilla. El preparador azul decidió darle la titularidad en el pivote defensivo a Jonathan Vila, que había ocupado esa posición frente al Mallorca y había cuajado una gran actuación.
El destino quiso que Torró sólo estuviera 18 minutos en el banquillo del estadio burgalés, pues Vila se lesionó en una acción nada más comenzar el encuentro y no pudo continuar, por lo que Hierro se vio obligado a acudir de nuevo al alicantino.
Un toque de atención con el que el técnico del Real Oviedo ha querido demostrar que no hay ningún jugador indiscutible en el plantel, que quiere que haya competencia y que los futbolistas le pongan las cosas difíciles a la hora de decidir la alineación.