Rodri Tarín sufrió la DANA en Chiva: "Unos lo pierden todo y otros se pasean con su uniforme impoluto sin ofrecer ayuda"

Los efectos de la DANA que ha arrasado la Comunidad Valenciana no entienden de ricos ni pobres. Una catástrofe de estas dimensiones arrampla con todo lo que se interpone en su lugar. Da igual que tengas un bajo con una hipoteca a 40 años en Paiporta que te hayan ido mejor las cosas, lograses montar una empresa y afincarte en la nave de un polígono de Chiva. Precisamente este último es el caso de Rodri Tarín, exjugador del Real Oviedo. O, más bien, de su padre, cuya empresa ha quedado destrozada y lo ha perdido casi todo en una de las zonas más asoladas por el temporal de toda Valencia.

Así las cosas, el exjugador oviedista, quien dejó el club carbayón a su pesar, ha concedido una entrevista a los compañeros de El Comercio. El central, que ahora mismo está sin equipo, desvela que la tormenta le cogió fuera de Chiva, pero que en cuanto pudo regresó. Desde entonces está plenamente involucrado en la reconstrucción de la zona y, por supuesto, de la empresa de su padre. "Está bastante mal, todo el polígono está destrozado".

No obstante, por fortuna, todos en su familia están bien. Eso sí, tiene amigos y conocidos que lo han perdido todo y que incluso han fallecido. Eso hace que entienda muy bien el desazón del pueblo: "La gente se siente abandonada. Sola. Cómo no van a estar indignados...", asevera.

Asimismo, aprovecha para enviar un mensaje a las altas esferas: "He estado aquí desde el primer momento y, salvo personal del ayuntamiento, no he visto nadie de las instituciones públicas a ayudar".

Una sensación en la que, además, señala a más de uno: "Hay gente que lo ha perdido todo y que está en la calle, mientras que veas a otros cómo se pasean con los uniformes impolutos sin ofrecerles ayuda. Es una auténtica vergüenza", sentencia.

El sufrimiento de Rodri Tarín y el de otros oviedistas del plantel

De este modo, Rodri Tarín es uno de los que más está arrimando el hombro en esta catástrofe. No es el único oviedista (o ex) en apoyar la causa. Las palabras de Carlos Pomares inspiran a seguir trabajando para salir adelante.

Del mismo modo, el sufrimiento de Aarón Escandell evidencia que la situación no está siendo fácil para absolutamente nadie. No en vano, hay familias que lo han perdido todo y, a día de hoy, no saben cómo van a reponerse de lo sucedido.

Por su parte, el club también ha querido apoyar a la causa. Es por eso que, de manera conjunta con el Burgos, han organizado una subasta benéfica de las camisetas del último partido. Los beneficios irán destinados a ayudar tras la DANA. Un gesto que dignifica y engrandece a una institución como el Real Oviedo.