Borja Bastón y su última temporada en el Real Oviedo: "Fue muy dura, aunque muy bonita a la vez"

A poco más de 24 horas para disputar la final de la Copa Intercontinental frente al Real Madrid, el delantero Borja Bastón ha recordado su último año en el Real Oviedo desde la distancia. Tras abandonar el Carlos Tartiere este pasado verano, el futbolista español, que ahora juega en Pachuca, está a las puertas de jugar, posiblemente, el encuentro más importante de su carrera.

En una entrevista en As, Borja Bastón ha destacado que "la ilusión es la mayor arma que tenemos". "Tenemos ilusión y muchas ganas... Posiblemente, es el partido de nuestras vidas. Difícilmente te vas a encontrar en una final así otra vez, así, de este calibre".

Bastón tiene contrato con Pachuca hasta 2025 y, aunque ahora mismo esté centrado en la final, ha valorado su futuro. "Me encuentro bien, aunque lógicamente no estoy jugando lo que yo querría. Todo tiene una adaptación. Es un cambio muy grande. Aparte, las condiciones en las que vine fueron difíciles porque acabé la temporada con el Oviedo el 24 de junio y el 28 ya tenía que estar en Pachuca haciendo la pretemporada. No tuve descanso y no pude resetear la cabeza".

Acerca de su última temporada en el Real Oviedo ha reconocido que "el año pasado en Oviedo fue muy duro, aunque muy bonito a la vez. Tuvimos un golpe doloroso al final, pero yo ahora sólo estoy centrado en esta final. Es bastante grande el momento como para estar pensando en otras cosas".

La carta de despedida de Borja Bastón del Real Oviedo:

"Oviedistas; nunca podría deciros adiós.
Porque en mí tenéis desde hace mucho a uno más de vosotros. Porque mis hijos son dos más de esos cientos de pequeños que llenan las calles de vuestra preciosa ciudad con camisetas de su equipo. Asegurando el futuro, cantando tus canciones mientras aprender a hablar, y en el caso de Lucía además nacida como una ovetense más.

Nunca podría deciros adiós porque han sido muchos minutos, muchos goles, muchos golpes, muchos segundos inolvidables. Os elegí, y repetí mi elección cuando hubo posibilidades de marcharme antes de lo previsto. Y no me arrepiento de "este amor". Porque esa elección me permitió defender el brazalete hasta acariciar el cielo, casi alcanzarlo, quedándonos a minutos de lograr vuestro y nuestro sueño. Me he vaciado y lamento muchísimo no haber podido ser uno de los hombres, que estoy seguro, os lo acabará brindando. Porque nuestra gente, nuestra ciudad, nuestro estadio, nuestros trabahadores, jugadores, entrenadores... se merecen que el mundo entero disfrute del Real Oviedo en lo más alto.

Ahora, no puedo deciros adiós, porque lamento que no haya sido posible otra elección. Desde este momento me convierto en uno más de vosotros. Y más pronto que tarde estaré aquí para celebrar el regreso a lo más alto.

Hasta pronto Oviedo.
Os llevo en el corazón".