La Real Sociedad fue la viva imagen de la frustración en la derrota por 0-1 ante el Celta de Vigo en el Reale Arena que deja la clasificación a competiciones europeas muy lejos del equipo donostiarra en la despedida de Imanol Alguacil. Esto se pudo ver en los gestos de los futbolistas, que no daban crédito a que el gol no llegase, como un Take Kubo que acabó a empujones con Yoel Lago.
El jugador japonés estuvo desquiciado durante todo el encuentro en el que no le salía nada a pesar de intentarlo una y otra vez. Además, estuvo muy vigilado por la defensa celtista y, de hecho, en alguna ocasión el nipón terminó discutiendo con sus rivales mientras reclamaba a García Verdura que le pitara las patadas que estaba recibiendo.
Los goles seguían sin llegar para la Real Sociedad y el propio Take Kubo tuvo alguna ocasión para colocar el empate en el Reale Arena. El mediapunta agarraba la pelota y se lanzaba hacia el área del Celta hasta encontrarse con algún defensor del equipo dirigido por Claudio Giráldez.
En el tiempo de descuento dejó una de las imágenes del partido después de recalcar que una y otra vez le estaban pegando sin señalar falta. Yoel Lago se encaró con el futbolista asiático y los dos se enzarzaron con un empujón propio de dos futbolistas de sangre caliente.
La asistente Eliana Fernández González tuvo que colocarse entre el japonés y Yoel Lago para que hubiera paz entre ambos futbolistas. La situación no pasó de ahí y, pocos minutos, después, García Verdura señaló el final del partido que deja a la Real Sociedad a punto de decir adiós al sexto año consecutivo en competición europea.
Un triste adiós a la etapa de Imanol Alguacil, que se despedirá del Reale Arena el próximo domingo ante el Girona. La cara de los jugadores donostiarras tras el choque lo decía todo incluyendo la de Take Kubo, tumbado sobre el césped del recinto guipuzcoano sin dar crédito a lo que acababa de suceder.