Óscar González, la bestia negra del Real Zaragoza

Óscar González no está teniendo una buena temporada. Ha vivido y vive más jornadas fuera que dentro del campo. En la actualidad se encuentra lesionado por un edema en el sóleo derecho que le lleva dejando fuera de las citaciones de Miguel Ángel Portugal en las últimas semanas. Esperando saber cómo avanza la semana para imaginar si se puede contar con él, el '10' del Real Valladolid recuerda todo lo vivido contra el Real Zaragoza desde que regresó a Valladolid en 2010.

 
Desde que abandonara Grecia para regresar al club que le formó, el charro siempre que ha jugado ante el Real Zaragoza le ha marcado. Cinco coles en cuatro partidos. Desde un intrascendente tanto en la última visita maña a Valladolid hasta el primer gol blanquivioleta tras regresar a Primera división. Diferentes recuerdos ante un equipo del que formó parte cuatro temporadas, con el que disputó 154 partidos y con el que hizo 17 goles.

Por la puerta grande

El 20 de agosto de 2012 es un día imborrable en la memoria de Óscar González. Tras vivir lo que él había soñado desde su vuelta a Valladolid, el equipo regresaba a Primera. Lo hacía en un lugar especial para él, La Romareda, y por la puerta grande. En él iban a estar puestas muchas miradas. El jugador las soportó para ser determinante. El charro anotaba, antes del descanso, el gol que daría la victoria al Real Valladolid. La primera en su regreso a la élite.
En esa misma temporada, en el partido de vuelta disputado el 20 de enero, el '10' volvió a anotar. Su tanto no fue determinante pero sí importante para la victoria (2-0) ante el equipo de Manolo Jiménez. Esos goles fueron los últimos del charro en Primera al Real Zaragoza. Los tres siguientes, en Segunda división la temporada pasada.
El doblete anotado en La Romareda el 4 de enero de 2015 y el solitario gol en la derrota (1-3) en el duelo del pasado 24 de mayo hacen que el salmantino sea un auténtico dolor del cabeza para el Real Zaragoza desde su regreso a España. Cuenta sus partidos por goles y suma los encuentros ante los que fueron sus compañeros con alegría y emoción. Ahora, en un momento muy duro para su carrera, el jugador sueña con poder vestirse de corto ante el Real Zaragoza para poder ayudar al Pucela a superar este momento tan duro y para, de paso, sumar un nuevo recuerdo a su unión contra el equipo maño, aquel club en el que estuvo entre 2004 y 2008.