Bruno Varela también encuentra acomodo

La plantilla 2015/2016 del Real Valladolid se ha ido deshaciendo en las últimas semanas. Tras la derrota final (1-3) ante el RCD Mallorca, un gran porcentaje de la plantilla, por no decir la gran mayoría, sabía que su lugar no estaría en el Nuevo Estadio José Zorrilla. Javi Chica, por ejemplo, se despidió antes de aquel partido. Pasadas las semanas se han ido conociendo el futuro de algunos de los integrantes del proyecto que empezó Gaizka Garitano y que terminó Alberto López.

 
Así, si hace pocos días se conocía la llegada de Manu del Moral al CD Numancia y el viernes fue oficial la incorporación de Alejandro Alfaro al Córdoba CF, el último en encontrar acomodo ha sido Bruno Varela.

Cinco temporadas

El portero portugués del Pucela, que solo jugó un partido en su cesión desde el SL Benfica, ya tiene nuevo club. El cancerbero es nuevo jugador del Vitória de Setúbal para las próximas cinco temporadas. El futbolista emprende una nueva etapa fuera de los focos de Zorrilla, un entorno al que llegó para suplir a Diego Mariño, que ahora ha firmado por el Sporting de Gijón, a finales del pasado mercado invernal pero que no le reportó nada. Pese a la presencia de tres entrenadores, el liderazgo de Kepa Arrizabalaga le dejó en un rol tan secundario que el tercer portero del equipo, Julio Iricibar, recién salido también del Pucela tras 14 temporadas, jugó el doble de partidos que él.
Ahora, en un proyecto a largo plazo, Bruno Varela podrá demostrar las cualidades y aptitudes tan positivas que se le veían en los entrenamientos en los Campos Anexos y no en su debut, un partido ante el Mallorca en el que no estuvo todo lo acertado que hubiera deseado un jugador que ha vivido toda una temporada esperando ese momento.