Costosa expectativa

Tras el último partido de la temporada 2016/2017, Isaac Becerra anunciaba que ésta había sido la temporada "más dura" de su carrera y ahora, en el momento de analizar la temporada de todos los integrantes del último Real Valladolid, es momento de saber por qué. El '13' blanquivioleta llegaba al Nuevo Estadio José Zorrilla como la gran esperanza del ambicioso proyecto de Paco Herrera. Era el "fichaje estrella". Llegaba con una expectativa muy alta y el problema fue que, quizás esa ilusión era demasiado elevada. Llegaba a Valladolid como el último Zamora de la categoría y éste, en lugar de ser un premio y un apoyo para el catalán, se convirtió en una crispación que le perseguiría durante toda la temporada.

 
Siendo el jugador que más ilusión generaba en el ambiente pucelano en el verano de 2016, su evolución blanquivioleta no fue positiva o, al menos, no fue tan alta como se esperaba. Pese a una brillante actuación en la victoria (1-0) ante el Real Oviedo, en la que realizó una brillante parada en el tiempo de añadido, la temporada de Becerra comenzaría a encontrarse con obstáculos desde la tercera jornada. En la victoria (2-1) ante el Girona FC, el tanto catalán dejaba señalado al cancerbero. Con él, comenzaría una llamativa serie de críticas que hizo que la lesión del portero en el Estadio Ramón de Carranza no fuera vista como algo doloroso para el equipo.
Su estado de forma y la poca confianza que, realmente, se tenía en él le hicieron no ser una baja muy significativa para el Pucela. Hasta ese partido, las cifras de su primera temporada en Valladolid no eran excesivamente positivas. No eran buenos en dígitos pero, sobre todo, no eran los números esperados desde esa elevada y costosa exigencia con la que firmaba por el Real Valladolid. Su bagaje en LaLiga 1|2|3 y los premios de mejor portero de la categoría y de Zamora, ambos recogidos ya como blanquivioleta, fueron un peso más que una bendición para un portero que ha alternado rachas de gran juego con otras de bajo rendimiento.

La mancha de Anduva

Pese a todo lo vivido durante una exigente temporada, Isaac Becerra llegaba al tramo final de la temporada en un buen estado de forma. Tras la dolorosa derrota (6-2) ante el Sevilla Atlético, el '13' comenzaba a ejercer su lideragzo y el peso que se le intuía con su fichaje. La parada realizada en la victoria (0-3) ante la Unión Deportiva Almería demostraba el tipo de portero que es y el momento en el que se encontraba. Para ese tramo final defendía grandes números pero todo quedaría marcado por el fallo en el empate (2-2) ante el Club Deportivo Mirandés.
Las grandes sensaciones y los buenos dígitos firmados en las últimas jornadas se borraban. El reflejo y el poso de la primera temporada de Isaac Becerra en el Real Valladolid quedaba marcado por aquel gol en propia de Luciano Balbi. Esa pérdida de dos puntos dejaba al descubierto una dura temporada para la que se suponía que sería la piedra más estable de este Real Valladolid pero ni ella tuvo un puesto y un estatus asegurados en una temporada dura para todos. No sólo para él.