La Copa se escribe en Verde
El Real Valladolid visitaba Mallorca y el Estadio de Son Moix para volver a verse las caras ante un combativo equipo bermellón, pero, sobre todo, para iniciar su andadura copera. Tras la idílica situación liguera, el equipo de Sergio González buscaba nuevos retos y lo hacía ofreciendo grandes oportunidades.
Así, la previa del partido estaba marcada por la ilusión de un Pucela que quería seguir alargando su buena racha de resultados y la ambición de un grupo de jugadores que vivirían un duelo, que más que un encuentro de Copa del Rey, era una gran oportunidad para ofrecerse como una alternativa para los planes ligueros.
La previa resultaría ser calcada de la realidad del juego posteriormente ejecutada. Con una primera parte tranquila, sin sobresaltos ni grandes exigencias, el Real Valladolid, en la pierna izquierda de Daniele Verde, supo dejar sentenciado el partido y, muy posiblemente, la eliminatoria.
Tras el doblete del atacante italiano, el Pucela supo dormir el partido, sabe sufrir, y comenzar a pensar en el duelo de este sábado, desde las 16.15 horas, en el Estadio Santiago Bernabéu.
Verde marca diferencias
El encuentro copero del Real Valladolid en Palma estará siempre marcado por la actuación de la primera parte de Daniele Verde, pero, también, por el apagón sufrido en los primeros minutos. Tras apenas 120 segundos desde el inicio del partido, las luces de Son Moix se apagaron y el choque vivió un parón de más de 10 minutos.
Tras la reanudación, previo paso por los vestuarios, Verde, como el pasado viernes, asumió protagonismo y se erigió como el gran protagonista del bando pucelano. Si ante el equipo perico se 'sumó' a la fiesta, en este caso tomó protagonismo y prolongó su gran momento.
Con un golpeo seco tras la reanudación del partido, Verde mostró parte de su potencial pero no sería hasta el minuto 35 cuando se terminó de encontrar cómodo. Con espacios y en transiciones de pocos metros, el '11' es determinante y lo fue con el segundo gol. Segunda oportunidad de buscar portería y el italiano no se lo pensaba para dar un golpe casi definitivo a la eliminatoria.
Otro partido
Con la sensación de que el Pucela no actuaba al límite, asumiendo que éste era un 'partido' de 180 minutos, la renta de dos goles hizo contemporizar mucho el juego al Real Valladolid. Comenzando a mirar incluso al duelo ante el Real Madrid, Sergio movió el banquillo y juntó líneas. El catalán quería, dentro de su versión ganadora, no correr riesgos.
La propuesta del entrenador era hacer un partido lento y sin ocasiones. Sergio quería vivir del marcador y, pese a que el RCD Mallorca no supo cómo actuar ante esta propuesta al inicio, con el avance de la segunda parte sí fue encontrando espacios y oportunidades.
Mirando al Santiago Bernabéu
Así recortó distancias, gracias al acierto de Sergio Buenacasa, y encerró en muchos momentos al Pucela en su campo. El equipo de Vicente Moreno intentó sacar rédito a 'sus' minutos, pero el Pucela supo defenderse. Este equipo, independientemente de los jugadores, sabe sufrir y, en este caso, vivir del talento de Daniele Verde.
Tras los dos destellos de calidad del atacante italiano, el Real Valladolid supo vivir de las rentas obtenidas para, así, comenzar a soñar con su siguiente objetivo. Desde la sexta posición liguera y con ventaja en la eliminatoria copera, los de Sergio González afrontan la visita al Real Madrid con la confianza plena tras sumar siete partidos consecutivos sin perder.
