El problema de Sekou
Sekou Gassama recibía un importante golpe la semana pasada al saber que debía pasar, nuevamente, por el quirófano por la lesión por la que fue operado el pasado mes de diciembre. El delantero del Real Valladolid, cedido en el Club de Fútbol Fuenlabrada, ha sufrido un importante revés en un momento y en una temporada crucial para él.
Vinculado al Estadio José Zorrilla hasta el año 2024, el de Granollers debía dar un golpe a su carrera en esta temporada y encontrar toda la estabilidad que demanda su evolución futbolística pero el objetivo va a estar muy lejos de poder cumplirse al sufrir estas dos operaciones. Siendo la irregularidad el principal problema de Sekou Gassama en su carrera, ésta era la campaña que debía ser definitiva para el delantero en sus pretensiones y explosión.
Actualmente, el delantero suma 469 minutos, repartidos en ocho partidos. Obviamente, el bagaje es corto para un jugador que no encuentra la estabilidad y que vive grandes altibajos de rendimiento por las diferentes muestras de confianza que ha encontrado. Si esa estabilidad para asentarse en un lugar, Sekou está teniendo problemas para cerrar las temporadas con más de 1.000 minutos.
El ejemplo que mejor le define es el de la pasada campaña, la 2019/2020. Tras el buen inicio en la Unión Deportiva Almería, con cinco goles en las primeras seis jornadas, el jugador perdió la confianza tras el cambio de entrenador y terminó por cambiar de equipo. Ya en Fuenlabrada, previo paso por Zorrilla, Sekou cayó lesionado en un inicio y le costó, entre la recuperación y el confinamiento, tener la regularidad que necesita cualquier jugador pero más aún un perfil como el suyo que siempre se hace importante en los equipos.
20 goles en 31 titularidades
Sekou Gassama siempre suma. No necesita estar al 100% de sus cualidades para mostrar su mejor nivel pero sí que demanda confianza y regularidad para mantener los registros de juego y goles que suele defender. Pese a todas las dificultades en las que ha estado envuelto en, por ejemplo, las tres últimas temporadas, Sekou asegura rendimiento. En ese tiempo ha promediado un gol cada 134 minutos y tras sólo 31 titularidades en los poco más de 2.600 minutos que ha sumado en Almeria, Valencia y Fuenlabrada.
Esa falta de regularidad es la que está lastrando al jugador y la que está debilitando su segunda etapa en el Estadio Fernando Torres. La temporada completa que iba a vivir en el equipo madrileño era capital para sus pretensiones y objetivos pero, por desgracia, el jugador cedido por el Real Valladolid no ha encontrado la regularidad que necesitaba tras una carrera marcada y definida entre cambios de entrenador y lesiones.
Con las condiciones que tiene ahora mismo sería el indiscutible delantero centro titular del equipo. Lo mismo le ha pasado a Marcos André con su lesión. Muy mala suerte estamos teniendo con estas lesiones.