Ibiza ofrece soñar

Visitar Can Misses para el Real Valladolid es novedoso y puede que sea histórico. El enfrentamiento entre los pucelanos y la UD Ibiza puede ser un punto de inflexión determinante para las aspiraciones e ilusiones blanquivioleta. Del viaje a tierras ibicencas puede salir una fecha inolvidable pero, también, una resignación muy grande. Del Real Valladolid depende.

Lo de Ibiza no es un duelo a cara o cruz, pero casi. El enfrentamiento ante el equipo de Paco Jémez puede hacer que el Real Valladolid dependa de su partido para conseguir el ascenso directo o que se tenga que resignar con la disputa del play off. Con un ojo en el Estadio de Ipurúa, la ambición pucelana por la victoria es máxima. No hay otra opción.

Los vallisoletanos saben qué oportunidad tienen entre manos y van a buscarla con toda sus fuerzas tras conseguir una tendencia y una dinámica muy positiva. Olvidada la derrota (1-2) ante la Real Sociedad B, la tendencia es otra. La victoria (2-0) ante la Sociedad Deportiva Ponferradina y, ante todo, la conseguida (0-2) en Ipurúa suponen la mayor confianza sobre el equipo.

Sólo un cambio

La inercia blanquivioleta ahora es muy positiva. Si a ella le sumamos los recursos de los que tiene Pacheta, el Real Valladolid es un equipo peligroso. Con 24 jugadores convocados, al tener sólo la ausencia de  Óscar Plano, lesionado, desde ElDesmarque Valladolid apostamos por una línea similar a la de los dos últimos partidos.

El regreso de Toni Villa al once titular, en lugar de Anuar Tuhami, supone la principal novedad de un Real Valladolid que se define en estos momentos por jugadores con Iván Sánchez, Álvaro Aguado, Roque Mesa y Jawad El Yamiq.

Con ellos y en un duelo arbitrado por el colegiado cántabro López Toca, el Real Valladolid sabe qué tipo de oportunidad tiene entre manos. Ganar parece una obligación que, a su vez, llevaría a optar al sueño de buscar el ascenso directo en la última jornada. En definitiva, una oportunidad histórica.