No termina de cogerle el pulso el Real Zaragoza ni a su juego ni a sus sensaciones. Lucas Alcaraz volvía a apostar por tercera semana consecutiva por los tres centrales sobre el terreno de juego y, como ya sucediera ante el Mallorca la pasada jornada, el conjunto aragonés volvió a ser un cúmulo de altibajos. Al final el punto de penalti decidió y el duelo se saldó con una nueva derrota en Alcorcón.
Comenzó el partido con un Zaragoza que realizó una presión intensa y alta durante los primeros compases de juego. Incluso fueron los de Lucas Alcaraz los que tuvieron la primera ocasión clara del encuentro, con un disparo de primeras de Pombo. La cosa pintaba bien, sin embargo sería un espejismo que duraría apenas 10 minutos.
Poco a poco el equipo se fue hundiendo y fue cuando el Alcorcón tomó la batuta del juego. De hecho, en lo que a posesión se refiere, el cuadro alfarero fue el que salió victorioso en la primera parte. Lo mejor para el Real Zaragoza es que se llegó 0-0.
El problema es que la intensidad no se tradujo en mayor presión al rival. En la faceta defensiva, el Real Zaragoza fue demasiado blando a la hora de recuperar el balón y siempre llegó un segundo tarde a las segundas jugadas. A eso, hay que sumarle que la producción ofensiva de los aragoneses fue muy lenta, ya que el Alcorcón supo tapar bien los espacios. En el escenario contrario, los madrileños llegaron con demasiada facilidad al marco de un Cristian que a punto estuvo de pifiarla en la recta final con un mal rechace.
De pifias andaba la tarde, si no que le pregunten a Sagués Oscoz. No dio ni una. Primero con un claro penalti que cometió Nieto y que decidió, para suerte blanquilla, no pitar. El canterano, por cierto, no tuvo su mejor noche y en la primera mitad estuvo demasiado sobrepasado en todo momento, llegando casi siempre a destiempo y tomando malas decisiones.
Después, el colegiado no pitaría otro claro penalti, en este caso en área contraria, con un agarrón de Juan Muñoz a Delmás. Finalmente, el ariete ex zaragocista a punto estuvo de dejar a su equipo por delante en el descanso. Logró un gol legal, pero el colegiado decidió anularlo por fuera de juego. Por cierto, incluso con tres centrales, la defensa hizo aguas una jornada más con un balón a la espalda.
La primera medida, precisamente, que tomó Lucas Alcaraz de cara a la segunda parte fue poner sobre el tapete a Lasure y retirar a un desafortunado Nieto. La cosa en ese costado, sinceramente, no mejoró demasiado ya que el recién incorporado cometería penalti sobre Sangali y el conjunto alfarero golpeó primero en el marcador con 1-0.
Desde ese momento, el Real Zaragoza fue algo parecido a un quiero y no puedo. No sería por llegadas o por voluntad. Pero es que las buenas combinaciones no se concretaron. Fue tanto el afán por pasar, que apenas se vieron disparos a puerta por parte de los de Lucas Alcaraz.
El técnico quiso agitar el árbol y siguió la fórmula de la semana anterior, pero esta vez quitando a un defensa. Retiró del terreno de juego a Álex Muñoz para dar entrada a Marc Gual y así, esta vez sí, volver al rombo.
Benito, de nuevo, fue el que más lo intentó por su banda, sin embargo no recibió los apoyos suficientes y, en muchas ocasiones, llevó la guerra por su cuenta sin concretar el peligro de manera definitiva. Entre las ocasiones claras del conjunto aragonés... poco que contar. Un disparo maltrecho de James al inicio de la segunda mitad y un remate de Delmás a la salida de un córner.
En la recta final del encuentro Pombo dejó su sitio en el campo a Soro, que después de varias jornadas volvía a disfrutar de minutos. Durante varios minutos, el Real Zaragoza encadenó buenas jugadas de peligro, pero por enésima vez, falló el último pase. A dos minutos de la conclusión, el Alcorcón sentencia por medio de Jonathan Pereira. Dorca peinaba un balón, al que llegó tarde Delmás, y Jonathan Pereira sin marca acertó en el mano a mano con Cristian. Fue Perone, n este caso, el que demostró tener una enorme falta de tensión competitiva dejando suelto al ariete.
Naufragio mayúsculo en Santo Domingo de un Real Zaragoza que sigue sin dar con la tecla de su juego. Lejos, lejísimos, queda ya el buen inicio liguero y ahora el conjunto de Alcaraz solo es capaz de jugar a fogonazos. Otro mal encuentro del cuadro aragonés que no encuentra su estilo y que se deja otros tres puntos por el camino.