Una semana para vaciar la enfermería
El Real Zaragoza volverá a la acción el próximo fin de semana en Córdoba después de una semana de descanso tras no disputar el partido ante el Reus. Días que han servido para reponer al equipo en lo anímico tras la dura derrota frente al Alcorcón en La Romareda y con la voluntad de recuperar en lo físico a varios futbolistas que podrían volver en el Nuevo Arcángel.
Además de la buena noticia de los tres puntos cosechados sin jugar, Víctor Fernández cuenta con la buena nueva de poder recuperar jugadores de cara a un compromiso que, visto lo visto, se presenta como una dura prueba de cara a conseguir la salvación frente a un Córdoba sin apenas margen de maniobra.
Bien podrían llegar al partido dos futbolistas como son Benito y Papu, que han trabajado con normalidad en esta semana de excepción y que mostraron buenas sensaciones en el partidillo que cerró el trabajo del equipo el pasado viernes. No son los únicos. También James se espera que pueda volver al grupo en los próximos días. El nigeriano recibió un duro golpe en el partido ante el Alcorcón y, aunque se descartó una lesión grave, se evitó su presencia con el resto de sus compañeros durante el trabajo de la pasada semana.
Quedarán las incógnitas de Dorado y Lasure. Ambos futbolistas arrastran lesiones que les ha impedido formar parte del equipo durante las últimas semanas. Problemas musculares en los dos casos, aunque sean situaciones diferentes. Bien podría llegar Dorado al partido de Córdoba, apurando sus opciones de recuperación, por lo que habrá que seguir de cerca su evolución.
El que más difícil lo tiene es Lasure, al que se le reprodujo la lesión sufrida con anterioridad en la semana previa al partido ante el Cádiz, de lo que han pasado poco más de dos semanas, por lo que la precaución demanda que siga la recuperación con calma de cara a poder ayudar al equipo en la recta final de la competición.