El deseo de Víctor y el ejemplo de Osasuna
No se puede negar que Víctor Fernández es uno de los principales artífices del buen momento que está viviendo el Real Zaragoza en la actualidad. Segundo en LaLiga SmartBank, el conjunto aragonés parece destinado a luchar por el ascenso directo hasta el final de la temporada, un objetivo que no se marcaba en el inicio de la campaña.
En buena medida, el éxito cosechado hasta la fecha puede enmarcarse en la claridad de ideas con la que el técnico zaragozano finalizó el curso anterior, sufriendo hasta el final para evitar el descenso, toda una lección de cara a afrontar la nueva etapa. Así lo manifestaba en una entrevista para ElDesmarque Zaragoza una vez concluida la liga.
Víctor Fernández mostraba las lineas maestras de lo que quería para el Real Zaragoza en su nuevo desafío, un retrato robot que parece haberse cumplido a la perfección. El entrenador reclamaba que “tenemos que reforzar la estructura física del equipo”, lo que suponía aumentar la envergadura de sus futbolistas; además, también quería “jugadores con más energía, con más velocidad, con más vitalidad” y por último, añadía la necesidad de sumar futbolistas con experiencia.
Víctor Fernández y el espejo de Mallorca y Osasuna
Como ha manifestado en diversas ocasiones, también entonces el Mallorca se convertía en el principal referente, “es un equipo que ha jugado muy bien al fútbol”, aunque mantenía otro ejemplo, al que parece estar asemejándose el Real Zaragoza en la actualidad, el CA Osasuna, “a lo mejor no es el equipo más vistoso, más espectacular, pero sí que ha sido un fútbol vertical, abierto y ofensivo”. Del equipo navarro destacaba además el equilibrio que había conseguido, alcanzando las primeras posiciones tanto a nivel goleador como en cuanto a los equipos menos goleados.
La pasada campaña, Osasuna alcanzó el título liguero tras ser el equipo más goleador de LaLiga SmartBank con 59 tantos y el cuarto equipo menos goleado, con 35. Un ejemplo que está siguiendo ahora el Real Zaragoza, que se ha convertido en el segundo más goleador, con 45 y el tercero menos goleado, con 30. Un ejemplo perfecto si finalmente se consigue el objetivo del ascenso y que desgranaba como clave fundamental, “necesitamos jugar bien al fútbol porque es la mejor manera de conseguir resultados, pero hay que reconocer que la categoría exige un equilibrio, superior a otras, para que en ese factor defensa-ataque no haya un gran desnivel”.
