Acosta: "Nunca dudé de mis condiciones"
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Lautaro Acosta, en sus apariciones con el conjunto sevillista, ha desprendido muchas sensaciones, pero sobre todas, carácter. Y este mediodía ha vuelto a hacer gala de ello, esta vez en la rueda de prensa posterior a su mejor día como sevillista desde que llegó el pasado verano. "Estoy muy contento, en lo colectivo porque es importante siempre ir con ventaja a una cancha durísima como San Mamés y en lo personal por haber aportado mi granito de arena. Nunca dudé de mis condiciones, siempre estuve seguro de lo que podía hacer, pero las lesiones no me permitían demostrar nada. Necesitaba una oportunidad y demostrar que estaba a la altura de un grande como es el Sevilla y gracias a Dios se dio la victoria". El ex de Lanús ha querido explicar lo que le ha ocurrido con su tobillo durante más de tres meses: "Cuando decía que me dolía, me dolía un montón. Hacía falta lo que Sergio Bossi, el kinesiologo que vino de Argentina, me hizo, el fortalecimiento del tobillo. Era algo que me faltaba, el tema de meterme los dedos en el tobillo para poder romper el lugar donde estaba el hematoma... Lo que aportó Sergio fue fundamental. Lo fortalecí y me ayudó muchísimo, más al trabajo del personal de acá", señaló. Pero eso parece quedar atrás, y ahora llega el derbi.
"El sábado tengo un partidito importante", ha bromeado el argentino, que deseó que "ojalá que salga bien". "Estamos trabajando para ello, este grupo se lo merece, pero más que merecimiento, los derbis hay que ganarlos como sea. Los derbis no se juegan se ganan. Es un partido aparte, un choque distinto a los demás, estamos motivados, más allá del cansancio... Nosotros estamos bien, con muchas ganas, metidísimos en un partido que va a ser durísimo. Ellos vienen están incentivados con la llegada de Oliveira, cosa que no creo que a nosotros nos cambie nada, haciendo las cosas bien los resultados se van a dar solos. Tenemos equipo para sacarlo adelante", ha comentado.
Más centrado en el aspecto particular no ha dudado dedicar el gol ante el Athletic a su familia. "Porque siempre estuvo a mi lado. Hubo gente que me dijo que lo mío era psicológico, me perforé un pulmón, me fracturé una cara, un hombro... Sé que no era psicológico, que no era lógico lo que decían... Pensé en mi familia, en mis compañeros, que jugando dos partidos por semana se rompían el alma y siempre me apoyaron, principalmente en la gente, que, más allá de estar tres meses fuera, siempre me apoyó y confió en mí".
Por último, se ha postulado sin reservas para jugar el sábado y cualquier partido: "Quiero entrenar a tope, estar al cien por cien, dispuesto cuando el técnico me necesite. Creo que sí puedo aguantar, tengo 20 años y estoy para jugar 90 minutos, es lo que siento, después el cuerpo dirá".
