La Copa se pone cuesta arriba (1-0)

Valencia CF

1

0

Sevilla FC

 

Un discreto Sevilla, inocuo en ataque, cae en Valencia por 1-0 y tendrá que remontar en la vuelta si quiere sobrevivir en la Copa. Tras una mala primera parte, en la segunda gozó de algunas ocasiones, pero en ningún momento pareció capaz de maniatar a su rival, que parte con una buena ventaja para visitar el Sánchez Pizjuán la semana que viene.

Álvaro Ramírez |Siendo un resultado ajustado y perfectamente remontable, el 1-0 en contra es un marcador nefasto para afrontar la vuelta. Nefasto porque el Sevilla en Mestalla no ha podido marcar, y el gol en campo contrario es un privilegio que ya solo puede lograr el Valencia. El conjunto de Marcelino ha sido levemente inferior al Valencia, sobre todo en la primera parte, pero aún así ha gozado de oportunidades para llevarse un mejor resultado y sobre todo para haber marcado algún tanto. Es un problema este, el de la falta de gol, que se viene agudizando en los últimos encuentros y que lastra, y de qué forma, partidos y eliminatorias como las que disputa el equipo hispalense ante el Valencia.

Marcelino planteó el partido de forma muy estratégica y teniendo muy en cuenta el encuentro de vuelta. Dio el control, la pelota, la posesión y veremos si la eliminatoria al Valencia en la primera parte. Sin rubor. Hasta diez jugadores metidos atrás esperando las acometidas che y alguna contra salvadora. Cayó en esos minutos el partido del lado local. Marcó Jonas en un fallo defensivo conjunto y no lo hizo el Sevilla en el par de oportunidades que tuvo. Mala cosa.
A partir de ahí las tornas se cambiaron tras unos primeros minutos de la segunda mitad en los que el Valencia quiso casi sentenciar el encuentro. Sobrevivió el Sevilla con alguna parada de mérito de Palop y ahí llegaron sus mejores minutos. Despertó el equipo nervionense y el Valencia cambió entonces el guión adaptándose a las necesidades sevillistas. Esperó atrás y buscó la contra. Negredo y Manu del Moral pudieron marcar, ocasiones tuvieron merced a Jesús Navas, artífice de la recuperación de los de rojo. Pero no acertaron. Como tampoco acertó Marcelino quitando a Negredo por Luis Alberto a diez minutos del final (antes había abierto el campo con Luna en la izquierda y recuperando el 4-4-2). El canterano, como hiciera en Mallorca, volvió a pecar de individualismo, ansiedad, precocidad y casi de soberbia y desperdició una gran ocasión tras un robo de Trochowski. Fue la última ocasión reseñable del Sevilla, al que le faltó gol para que su plan diera resultado. Ahora se encuentra con un 1-0 en contra y un Valencia que ha demostrado que es capaz de desarbolar la zaga nervionense. Se pone la eliminatoria cuesta arriba. Claro que no imposible, pero sí muy, muy difícil.