De Javi Varas a Sergio Rico: La historia se repite

La lesión de Beto contra el Madrid tras una entrada de Benzema mantendrá apartado al luso de los terrenos de juego entre dos y tres meses, según apuntaba ayer el Sevilla FC. Una baja de peso, que deberá ser sustituida por el canterano Sergio Rico, cada día con más experiencia en la élite profesional. A sus 21 años, tendrá la responsabilidad de defender la portería rojiblanca en el tramo más importante de la temporada. Mínimo, durante 16 jornadas ligueras y dos de Liga Europa. Una historia que recuerda a la que ocurriese hace ya cuatro temporadas, cuando una lesión de Palop permitió a Varas mostrar su mejor versión.

Este curso, Rico ha ido contando con minutos desde incluso antes de lo esperado. Aunque la lesión más grave de Beto ha llegado esta semana, lo cierto es que el portugués viene acarreando problemas físicos a lo largo de la temporada que le han impedido disputar todos los partidos. Así, en el primer encuentro liguero, contra el Valencia, tuvo que abandonar el campo tras un mal despeje en la banda. En Cornellá, la segunda jornada, jugó Barbosa, que también acabó lesionado. Comenzó entonces el momento del canterano para adquirir experiencia. Y no decepcionó. En total, cuatro encuentros de liga, cinco de Copa del Rey y tres de Liga Europa hasta el momento.
En Copa, jugó la ida de los cuartos de final frente al Espanyol, aunque para la vuelta Emery apostó por la veteranía de Beto. Aún así, ya dejaba entrever el técnico que el protagonismo de Sergio iría in crescendo, pues debían estar preparados ante una posible lesión del primer guardameta. Algo que ha ocurrido antes de lo esperado. La situación en la que se sume la portería del Sánchez Pizjuán tiene matices bastante parecidos a lo que ocurrió hace ya cuatro temporadas, allá por la 2010-2011. Por aquel entonces Andrés Palop, mejor portero de la historia del Sevilla, se lesionaba en la ida de la eliminatoria contra el Oporto, y dejaba su hueco a Javi Varas, también segundo arquero, e igualmente canterano. Su rendimiento fue alto.
En aquella ocasión, el problema sucedía más o menos en la misma fecha (el 17 de febrero), y el valenciano estaría apartado de los terrenos de juego 11 partidos, algo que aprovechó el de Pinomontano. El conjunto de Gregorio Manzano venció ocho choques de 15 disputados en liga (Palop volvió antes al equipo, pero le fue imposible recuperar la titularidad), encajando 23 goles entre ellos (en uno de ellos, el Madrid les anotó 6 goles en el Sánchez Pizjuán). Pero pese a ello, Varas terminó el año como titular, y lo comenzó de igual forma, con Palop esperando su oportunidad. Llegó a jugar 28 partidos entre todas las competiciones.
La temporada siguiente, el canterano actualmente en el Valladolid fue alineado de inicio en el mismo número de ocasiones, aunque su peso fue cayendo con el paso de las jornadas. Pese a que su inicio fue estelar (detuvo un penalti a Messi en el último minuto en el Camp Nou tras cuajar una gran actuación), su nivel disminuyó hasta tal punto que perdió la titularidad en la jornada 23, frente a la Real Sociedad. 
Sergio Rico tiene ante sí la posibilidad de igualar lo que hizo Varas, e incluso superarlo. Las puertas las tiene abiertas para lograrlo, pues Beto difícilmente llegue a tiempo para disputar algún que otro minuto a final de temporada, y Barbosa ha quedado relegado a un tercer plano por Emery. La historia se repite cuatro años después, y el Sevilla vuelve a entregarle las llaves de su portería a alguien de los suyos a quien ha ido formando a lo largo de los años en las categorías inferiores.