El fondo de armario también funciona

El Sevilla venció al Levante con un once con cuatro cambios respecto a la anterior alineación que dispuso Unai Emery ante el Athletic Club. El conjunto sevillista tenía el objetivo de sacar los tres puntos en el Ciudad de Valencia, aunque también era necesario dar descanso a algunos jugadores después del esfuerzo del sábado y también teniendo en cuenta el partido del próximo sábado ante el FC Barcelona.

Por ello, el técnico vasco decidió incorporar algunas alternativas en la alineación y respecto al encuentro con el equipo de Valverde, Emery alineó a cuatro futbolistas que no salieron de inicio. En el ámbito ofensivo, Gameiro fue titular en lugar de Carlos Bacca, que sí tuvo minutos pese a ser suplente. El delantero francés anotó el primer tanto del partido y estuvo muy participativo durante todo los minutos que jugó. Aleix Vidal tampoco salió de inicio y en su lugar entró José Antonio Reyes. El utrerano resolvió la papeleta de su equipo en tierras valencianas, asistió a Gameiro para que hiciera el primero y posteriormente él marcó el segundo.
En el centro del campo y en la zona defensiva, Emery también introdujo algunos cambios respecto a su anterior once. Banega no fue titular y la decisión de Unai fue la de adelantar la posición de Carriço. El portugués jugó en el doble pivote junto a Krychowiak; pero ante el Athletic de Bilbao, el luso disputó los 90 minutos como central. La defensa sevillista también fue tocada. El técnico sevillista puso como central titular a Kolo, que ocupó la posición de Carriço al encontrarse el portugués más adelantando. La posición de lateral derecho volvió a ser alternada, pues Unai suele poner a un jugador u otro según el rival. Este martes jugó Diogo Figueras en lugar de Coke; pues en el último partido en el Sánchez-Pizjuán, Emery decidió poner de titular al madrileño para proteger la banda por la que atacaba Muniain, que acabó el partido lesionado. El cerrojo sevillista también cambió y el técnico sevillista puso como central titular a Kolo, que ocupó la posición de Carriço al encontrarse el portugués más adelantando. 
El fondo de armario del Sevilla es bien amplio y todos los jugadores que saltan al terreno de juego, bien de inicio o desde el banquillo, lo terminan haciendo bien. La intensidad a la que Unai Emery tiene adaptado a sus equipos ha hecho que no se note si un jugador es intermitente o no, pues todos están en un gran estado de forma. De momento, el único problema que tiene el entrenador es la situación de Iago Aspas y la de Gerard Deulofeu. Ambos futbolistas no están contando con minutos y el gallego ni siquiera ha entrado en las últimas dos convocatorias. Sin embargo, el resto del plantel sí está cuando se le ha requerido. Fernando Navarro, Arribas, M'Bia... rinden cada vez que Unai decide que entren al césped. Ese es uno de los éxitos de este Sevilla que ya suma 61 puntos, el éxito está en tener a todos los jugadores enchufados y que los menos habituales lo hagan bien en cada oportunidad.