El Sevilla es el campeón... y lo sabes

El Sevilla afronta esta noche a partir de las 21.05 en el Stadion Petrovski de San Petersburgo la vuelta de los cuartos de final de la Europa League. Noventa minutos por delante, si no hay prórroga y penaltis, para hacer buena la épica victoria cosechada en Nervión hace una semana (2-1), remontando en los últimos minutos un partido que se había puesto muy cuesta arriba. Salió entonces el ADN de campeón cuando más falta hacía. Y ese mismo ADN será necesario esta noche para imprimir el nombre del Sevilla en una de las bolas del bombo de semifinales.

No hace mucho tiempo esta previa contra el Zenit comenzaría con una frase tan manida en el argot del periodismo deportivo como real en tantas y tantas ocasiones: cita con la historia. Sin embargo, hubo un día, precisamente como hoy, jueves de Feria, hace nueve años, que el Sevilla decidió reescribir su propia historia y acudir a noches como la de hoy como quien baja a comprar el pan una mañana de domingo.
El Sevilla ha ganado tres 'UEFAS' en ocho años y es el vigente campeón. El Zenit lo sabe, Emery lo sabe, Villas Boas los sabe, el vestuario lo sabe y el sevillismo lo sabe... Que se puede caer en San Petersburgo, sólo faltaba, pero tampoco cabe duda alguna de que la confianza en este equipo es absoluta. El Sevilla tiene que hacer lo mismo que viene haciendo en sus últimos doce partidos: no perder. O lo mismo que ha hecho siempre que ha visitado San Petersburgo (tres encuentros y dos resultados que valen para pasar y uno para llegar a la prórroga).
El miedo de Villas Boas
El Zenit es un rival de entidad mayúscula. Sirva como referente que es el único de los ocho cuartofinalistas que viene de la Liga de Campeones. Un equipo hecho a golpe de talonario que también sabe ganar la Europa League (2008). Además, recupera para la vuelta a uno de los delanteros más determinantes de Europa, el brasileño Hulk. En cualquier caso, si alguien impone en esta eliminatoria es el Sevilla. Que le pregunten si no a Villas Boas, que firmaba en la ida salir vivo del Sánchez Pizjuán para tener alguna opción en la vuelta.
Será un partido de alma y carácter. Y el Sevilla ha demostrado que tiene mucho de ambas cosas. Un buen ejemplo fue el empate en Liga cosechado hace tan sólo dos jornadas contra el Barcelona, el mismo Barcelona que ha descosido al PSG en los cuartos de final de la Champions y que nada pudo hacer para evitar la remontada (2-2) en Nervión ante el empuje del Sevilla.
El regreso de Hulk y la duda entre Beto y Sergio Rico
Villas Boas recupera casi a su once de gala. Vuelven Hulk, Danny, Igor Smolnikov y Domenico Criscito, pero pierde a Garay, el pilar en el eje de la defensa, y a Ryazantsev. Se espera a un Zenit más ofensivo, pues no le queda otra que ganar el partido si quiere estar en semifinales. Un equipo ruso más abierto no debe ser nunca una mala noticia para un Sevilla letal a la contra.
La única duda sevillista está en la portería. Emery no desvelará hasta última hora si jugará Sergio Rico o Beto. Parece un partido hecho a la medida del guardameta portugués, pero dependerá de cómo se encuentre realmente. Hoy sólo sirven jugadores que estén al ciento por ciento. Carriço, por su parte, salía ayer del entrenamiento con el pulgar levantado, apuntando su nombre para el partido, dando un paso al frente y diciéndole al entrenador: “míster, aquí estoy para lo que usted mande”.
El Sevilla afronta hoy en Rusia una noche grande. Una más.
 
Posibles alineaciones:
Zenit: Lodygin; Smolnikov; Anyukov, Neto, Lombaerts, Criscito; Shatov, Javi Garcia, Witsel, Danny; Hulk.
Sevilla: Beto; Coke, Pareja, Carriço, Trémoulinas; Krychowiak, Iborra, Vidal, Banega, Vitolo; Gameiro.