Simon Kjaer: altas cualidades que demandan ya la consagración
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Futbolista bien conocido en el fútbol internacional, el central diestro danés Simon Kjaer aterriza en el Sevilla FC para reforzar la tan necesitada demarcación de central, donde el club ha debido realizar una fuerte inversión para aumentar el nivel de los mimbres actuales.
Con la llegada de Kjaer, el Sevilla incorpora a un experimentado central de 28 años que destaca por su fortaleza física, contundencia, juego aéreo y por poseer un notable golpeo con su pierna diestra que lo faculta para el desplazamiento en largo del balón, así como para la facturación de faltas directas. Sus desplazamientos diagonales del esférico deben ser muy útiles para el equipo. Muy importante su poderío aéreo, apoyado en sus 190 centímetros que le hacen ser un futbolista dominante en ambas áreas. Central que no rehúye la disputa, bien curtido en partidos importantes a lo largo de su carrera. No es un defensor rápido, lo que le dificulta el marcaje si lo sacan de su zona, pues su actuación se basa más en la colocación y en saber ejecutar la acción en el momento adecuado. La velocidad en el centro de la zaga es algo que el club sevillista debería subsanar y en ese aspecto ni Kjaer ni los otros centrales con los que cuenta actualmente tienen esa cualidad. En las últimas temporadas en Francia y en Turquía, así como sin duda con la selección danesa, se ha visto a un Kjaer que ha ganado en jerarquía y liderazgo.
Kjaer despuntó pronto en las filas del FC Midtjylland, club puntero de Dinamarca, lo que le permitió dar el salto con sólo 20 años a una liga de primer nivel como la italiana firmando por el Palermo. En aquel buen Palermo del exsevillista Sirigu, Javier Pastore, Edison Cavani o el mítico Miccoli, destacaba en la retaguardia este joven central danés. Tan sobresaliente fue su temporada, que sonó con fuerza para los equipos más poderosos del continente, incluido el Real Madrid. Su juventud y rápida evolución futbolística hacían prever que sería uno de los centrales más importantes de los años venideros, pero sin embargo su progresión no fue ni lo amplia ni lo continua que demanda la máxima élite.
Tras salir del conjunto italiano hacia el acaudalado Wolfsburgo alemán por una importante suma de dinero, no supo adaptarse al equipo y recaló al año siguiente cedido en la Roma. En estas temporadas Kajer no rindió a buen nivel, sus cualidades parecían que se diluían e incluso se le notaba que había perdido concentración en las acciones defensivas. Resurgió futbolísticamente en la liga francesa vistiendo la camiseta del Lille -donde coincidió con Corchia, otro de los fichajes nervionenses de este verano-, erigiéndose con diferencia como uno de los mejores centrales del campeonato y recuperando la confianza que necesitaba para seguir progresando en su carrera. Tras dos temporadas en el club galo, firma por el Fenerbahçe turco donde se consolida como un baluarte indiscutible del equipo.
El mercado de centrales parece especialmente caro este verano, no hay mucha oferta y los buenos son costosos. De ahí el desembolso que ha debido acometer el Sevilla por este futbolista, siempre sabiendo que hablamos de un jugador contrastado preparado para rendir en el once titular desde el primer partido. La salida de Rami le hace daño deportivamente a la línea defensiva del equipo, pues el mejor Rami, el que está en plena forma y concentrado, es un central muy difícil de sustituir.
Kjaer tiene la oportunidad en Nervión de consagrar por fin en una gran liga sus cualidades, aquellas que llamaron la atención del fútbol europeo y que, a pesar de sus buenas últimas temporadas, aún no han alcanzado el alto nivel esperado.
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